El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha perdonado este lunes a los casi 1.600 condenados por el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021. Es una de las órdenes ejecutivas que el magnate ha firmado este lunes, poco después de su toma de posesión -exactamente en el mismo lugar que la turba asaltó hace cuatro años-, en las que ha tomado decisiones relacionadas con las prioridades de su nuevo mandato. Con el decreto, Trump protege tanto a los condenados por la violencia que provocaron ese día como aquellos acusados de delitos u ofensas menores.

Los perdones incluyen a 14 miembros de la organización ultranacionalista y neofascista Proud Boys y del grupo paramilitar ultraderechista Oath Keepers, que en su mayoría habían sido condenados por conspiración. En el mismo día, el ya expresidente Joe Biden ha concedido indultos preventivos a varios miembros de su familia y a excongresistas que habían investigado el Asalto al Capitolio, entre otros, por temor a que Trump pudiera perseguirlos injustamente. Biden dijo que no iba a hacerlo, pero finalmente ha pesado más el miedo. Él ha dicho que "no debe interpretarse erróneamente" porque no tiene que ver con que hayan cometido ningún delito.

Trump también ha ordenado al Departamento de Justicia que deje de lado todas las acusaciones que quedaban pendientes ligadas a los protagonistas del 6 de enero. En el Despacho Oval, Trump ha declarado que espera que la mayoría puedan salir de la cárcel ya esta noche. "Ya han estado en la cárcel mucho tiempo. Esta gente ha estado destrozada". Cuatro personas fallecieron en el asalto al Capitolio y más de 140 agentes resultaron heridos.

Entre los condenados había personas que habían golpeado con bates a la policía en su entrada por la fuerza en el Capitolio, cuando intentaron impedir que el Congreso validase los resultados de las elecciones de 2016, que Trump había perdido. Algunos habían sido condenados a más de diez años de cárcel, y, en el caso del exlíder de los Proud Boys, a 22 años de prisión, puesto que fue condenado por conspiración sediciosa -delito para el que es necesario probar que el condenado usó la violencia contra el Gobierno-. Enrique Tarrio ya ha sido liberado de la prisión en la que cumplía condena en Luisiana y tenía previsto volver a Miami, su ciudad, este martes.

De su lado, Joe Biden llevaba tiempo considerando el perdón preventivo aunque algunos de los que podían ser objeto de él, como el senador Adam Schiff, dijeron que no había hecho nada malo y que no lo necesitaban. Pero a Biden le preocupaba que durante meses, Trump haya estado apuntado a ciudadanos estadounidenses como "el enemigo" dentro del país, "más peligrosos que Rusia y China y otra gente".

Hay personas, como el el doctor Fauci que trabajó durante la primera administración Trump (2017-2021) como director del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas y coordinó las acciones de Estados Unidos contra la covid-19, que ya ha sido objetivo de ataques por parte de seguidores de Trump y otros grupos extremistas. Otros de los perdonados formaron parte del comité de investigación del asalto al Capitolio del 6 de enero de 2020, y son nueve congresistas, siete demócratas y dos republicanos.

Otras órdenes ejecutivas

Esta no ha sido la única orden ejecutiva que Trump ha firmado este lunes: también ha aprobado varias que tienen como objetivo revertir las políticas de Biden, ha declarado una emergencia nacional en la frontera por los cruces ilegales desde México, ha acabado con los programas de inclusión y diversidad, ha establecido que solo existen dos géneros y eliminado la protección para las personas trans en las cárceles y ha declarado otra emergencia nacional en energía, la primera de la historia de EEUU, entre muchas otras. Con respecto al veto de TikTok, le ha dado 75 días de plazo. También ha retirado a EEUU de la Organización Mundial de la Salud, algo que ya hizo en su anterior mandato, y del Acuerdo de París, el pacto de casi todos los países para luchar contra el cambio climático.