En Estados Unidos hacer campaña por uno u otro candidato político no te pasa factura profesional. En España todavía sí. Los cantantes y compositores han sido siempre los primeros en romper el secreto de su idolología política, manifestándola con normalidad, incluso poniendo su colofón musical en mítines de todos los partidos. Mantenían la certeza de ser libres porque su público asistía a los conciertos, y no rendían pleitesía al dinero público que les dejaba de contratar en los Ayuntamientos de signo contrario. Así ejercen su libertad Bertín Osborne, Miguel Bosé, Loquillo, Francisco, Marta Sánchez o Julio Iglesias. Algunos por ser valientes y decir lo que piensan, incluso reactivan su carrera musical como José Manuel Soto, sus conciertos además de buena música, tienen lo que destilaban los de Lluís Llach en la transición, aires de libertad.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 De la amistad al resentimiento: así se degradó la relación entre Obama y Biden
- 2 Puente medió con Marruecos para que Alsa cobrase una deuda
- 3 Convocatoria oficial de la Selección Española de fútbol para los Juegos Olímpicos de París 2024
- 4 El PSOE, tras la citación de Sánchez como testigo: es una "persecución política intolerable" y un "montaje para beneficio del PP"
- 5 Jyväskylä, la Atenas finlandesa que Alvar Aalto convirtió en cuna de la arquitectura moderna
- 6 El juez cita a Pedro Sánchez como testigo para que declare en Moncloa sobre el caso de Begoña Gómez
- 7 Las mejores frases motivadoras para empezar la semana
- 8 Vodafone cubrirá el 70% del ERE con bajas voluntarias
- 9 Guerra civil en La Coruña por la designación de Riazor como sede del Mundial 2030