Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, que es como tener un ministro sólo para la aureola de Pedro Sánchez, una especie de ministro sombrerero o ministro iluminador, estuvo en la SER para explicarnos el espíritu y el objeto de la mesa de negociación. “El proceso soberanista está terminado. Ahora estamos en el diálogo”, destacaba como titular el propio medio. La pregunta es, claro, que si el proceso soberanista está terminado, ¿qué hay que dialogar? Bolaños se afana en justificar la necesidad de algo que no es necesario, pero es que todo el llamamiento, toda la mesa, todo el oleaje y la peluquería y la reverencia y el rapto de banderas, todo el periplo de peregrino de Sánchez y hasta las gafas caedizas de Bolaños, como las de Clark Kent, están pensados para evadir una pregunta fundamental: ¿por qué hay que hacer algo?
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Mohamed VI: Radiografía de 25 años de reinado en Marruecos
- 2 El error de cálculo de Pedro Sánchez. Por Casimiro García-Abadillo
- 3 La presidenta, el marido, el juez y Miss Marzo
- 4 Convocatoria oficial de la Selección Española de fútbol para los Juegos Olímpicos de París 2024
- 5 Aflora una deuda millonaria en RTVE por viajes y dietas excesivos
- 6 Las meteduras de pata de Kamala Harris que llevaron al traste su campaña en 2019
- 7 Parón de las inversiones de fibra en Telefónica, Orange y Vodafone
- 8 Puente medió con Marruecos para que Alsa cobrase una deuda
- 9 Cuando ruge la marabunta