Los indepes todavía no dicen haber sido invadidos, aparte de por andaluces de Barcelona y motomamis de San Cugat, pero sí pueden sentirse dentro de la guerra y de la intriga afirmando haber sido espiados con catalejo, con zapatófono o con chis. Ese programa israelí, Pegasus, debe de ser muy sofisticado, superando en mucho a nuestro espía bajito disfrazado de lagarterana o a nuestro comisario de libreta gorda, pacharancito y puta de polígono, pero no sé si sirve de algo. Quiero decir que, de haberles espiado el Estado, eso no evitó el 1-O, ni que Puigdemont se escapara envuelto en toallas portuguesas, como un E.T. entre toallas portuguesas. Pero a los indepes, que son Mandela, Gandhi, Rosa Parks y la ballena Willy, todo en uno, como una especie de gallifante o Mr. Potato de la injusticia, sólo les falta ya ser Zelenski. O los últimos de Mariupol, que resisten bajo la ferralla cementerial de una fábrica como un desguace de buques, igual que tras un contenedor o un maniquí de tenista arrojados a la Diagonal.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 El marqués de Lises, el buscador de tesoros que seduce a Madrid
- 2 Así es el 'menú de clausura' (y excomulgado) que inspira Don PelayoFabada y arroz con leche estilo Don Pelayo, así es el 'menú de clausura' de las exmonjas de Belorado
- 3 Marruecos concede a Israel la exploración de gas en Sáhara
- 4 Hacienda cambia el límite para las personas con dos pagadores
- 5 ¿Ha tenido Justin Bieber una recaída en las drogas?
- 6 Inmigración: una cesión de dudosa constitucionalidad
- 7 García Ortiz puede quedarse en el cargo si le abren juicio oral
- 8 El acta de entrada en el despacho del fiscal general dice que "colaboró", pero el juez sostiene que destruyó pruebas en su móvil
- 9 El novio de Ayuso y la princesa Jesi