Máximo Huerta, exministro de un soplo y portadilla de aquel primer Gobierno de Pedro Sánchez que era como un casting de K-pop o un escaparate de Geyperman, ha revelado la última conversación que tuvo con él, y en la que el presidente quedaba como un malo de película con sillón de Emmanuelle, plan megalómano y huevera de plata. A Huerta no se le ha quedado nada de ministro, que no tuvo tiempo, así que sigue siendo un tipo normal con madre, perrita, trabajillo y ganas de rajar de aquel tío raro que, en un torreón de la Moncloa con reloj de columna, arpa de luz de persianilla y muñeco de ventrílocuo, sólo le hablaba de cómo iba a quedar él en la Historia. Yo creo que no hace falta ni que Pablo Iglesias diga que Sánchez “lo pagará”, que ya me parece condenado como todos los villanos o zumbados de película. Y además desde la primera escena, nada más quitarse los guantes de conducir, nada más aparecer con jersey de cuello de cisne, como aquellos malos de Colombo.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Hatamleh, NASA: "En el futuro nos casaremos con robots":
- 2 Aldama puede acabar con Sánchez
- 3 Nueva ley 'antiokupas' aprobada por el Congreso
- 4 Cena de Delcy con sorpresa... y la sorpresa era Pedro Sánchez
- 5 La ministra Margarita Robles se enfrenta a gritos con los afectados en Paiporta: "¡Yo no tengo la culpa!"
- 6 Los 890.000 euros de corrupción que asedian al Gobierno, según Aldama
- 7 Seis muertos, cuatro de ellos menores de edad, en un accidente de tráfico en Menorca
- 8 La OCU avisa, evita estos supermercados para comprar carne
- 9 La mujer de Aldama, clave en el blanqueo de capitales de la trama