Recientemente leí un artículo muy interesante. El artículo firmado por la periodista rusa Inna Afinogenova empieza con una rotunda denuncia de la persecución de los activistas antibelicistas en Rusia. La autora, muy audaz, explica los casos de Aleksei y Masha Moskaliov, Vladimir Rumyantsev, Maria Ponomarenko y Aleksei Gorinov, y acto seguido arremete contra la odiosa narrativa del Kremlin sobre el "ataque preventivo", la "desnazificación" y "desmilitarización" de Ucrania.

También menciona a los defensores de derechos humanos del proyecto mediático ruso OVD-info, proporciona detalladas estadísticas de expedientes abiertos por "desacreditación de las fuerzas armadas" e incluso cita a un diputado del Parlamento ruso que justifica a los neonazis de la unidad de mercenarios Rúsich.

El artículo está escrito con un estilo tan elegante y en un castellano tan perfecto, que, totalmente fascinada, me pongo a rastrear en Google información sobre esta maravillosa mujer que escribe esas palabras tan acertadas.

Y entonces mi fascinación crece aún más, porque Inna Afinogenova resulta ser una exempleada del canal propagandístico del Kremlin "Russia Today", y no una propagandista cualquiera, sino toda una "subdirectora de la versión española de la página web Russia Today". También descubro que en marzo de 2022 Inna dimitió de su cargo, se fue del medio propagandístico y publicó en las redes sociales su total desacuerdo con la guerra contra Ucrania.

Las noticias falsas y su premeditada desinformación durante largos años prepararon el terreno para las guerras de Putin

Tras haberme informado y llenado de emoción, vuelvo a la lectura del artículo anticipando todo tipo de revelaciones y confesiones, o al menos algún reconocimiento de responsabilidad corporativa o personal. Porque no es ningún secreto que el exempleador de Inna Afinogenova fue el verdadero artífice tanto de las represalias en Rusia, como de la guerra en Ucrania. Sus noticias falsas y su premeditada desinformación durante largos años prepararon el terreno para las guerras de Putin. Sin Inna y sus excompañeros no habría ni ataúdes, ni huérfanos, ni vidas destruidas. Porque donde no hay odio, no hay guerras.

Sin embargo, para mi gran sorpresa, no he encontrado en el artículo ni revelaciones ni remordimientos. En su lugar, he encontrado acusaciones a Ucrania de violaciones de los derechos humanos. Sí, lo han oído bien.
Un alto ejecutivo de un medio criminal, culpable de difundir deliberadamente información falsa con el fin de desencadenar una masacre, en vez de arrepentirse y prestar declaración, se dedica a acusar a la víctima de su propio crimen.

Es inaceptable que personajes implicados en la propaganda del odio sigan difundiendo los mismos mensajes contradictorios en España

Sorprendentemente, Afinogenova no repara en que todas las violaciones de los derechos humanos en Ucrania mencionados en su artículo - prohibición de partidos políticos, detención de miembros del Partido Comunista, persecución de colaboracionistas - son el resultado y la consecuencia directa de su propia actividad criminal. No habría habido guerra ni "cazas de brujas" ahora en Ucrania, si en 2014 no hubieran aparecido en su territorio bandas paramilitares del país vecino con un amplio apoyo mediático prestado por su medio de desinformación.

Nuestra Asociación de Rusos Libres compuesta por personas rusoparlantes residentes en España contrarias al régimen de Putin, considera inaceptable el hecho de que personajes implicados en la propaganda del odio y la desinformación sigan difundiendo los mismos mensajes contradictorios y carentes de lógica en el espacio mediático de España.

Yulia Taran es vicepresidenta de Rusos Libres-España, una asociación de rusos residentes en España creada por un grupo de activistas a partir de la ola de protestas en contra del régimen antidemocrático de Putin y de la invasión de Ucrania.