Unas 5.000 personas han llenado este miércoles 12 de octubre la plaza de Catalunya en Barcelona para celebrar el día de la Hispanidad, según cifras de la Guardia Urbana. La entidad D'Espanya i Catalans han asegurado que apoyarán todas las acciones que puedan emprender el Gobierno central, las Cortes y la justicia para impedir que los independentistas logren sus objetivos, incluso "castigos ejemplares".

Lo ha afirmado el portavoz de la entidad Javier Mecino, que ha instado a los participantes en el acto a "reconquistar el corazón de los catalanes que se han dejado manipular" por el independentismo.

Los manifestantes también han reclamado al Govern y a los diputados del Parlament "que respeten el ordenamiento jurídico y pongan fin al ilegal y descabellado proceso secesionista".

Así lo recoge el manifiesto que han leído durante el acto, que ha concentrado a miles de personas en el centro de la capital catalana, que ha pedido a los representantes políticos "seguir formando parte de España, un estado miembro de la UE y muy descentralizado, quizás demasiado".

'Una Cataluña de todos'

La entidad convocante de la manifestación ha pedido "tender puentes" entre la Generalitat y el Gobierno central para acabar con el proceso independentista. "Los catalanes del siglo XXI siempre hemos sido catalanes de una Catalunya de todos y, por tanto, de una España de todos", han proclamado los encargados de leer el manifiesto.

La organización ha celebrado la afluencia al acto pese a la amenaza de lluvia, que ha empezado a caer al finalizar los discursos, y ha asegurado que ha sido superior a la de años anteriores.

Entre los participantes han estado el coordinador del PP catalán, Xavier García Albiol, junto el líder del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, acompañados de diputados y concejales populares.

La movilización, en la que han abundado banderas españolas y carteles contra el independentismo catalán, ha comenzado en el cruce de Passeig de Gràcia con la calle Provença y ha transcurrido hasta la plaza Catalunya, donde ha coincidido a la hora de la clausura con un desfile folklórico boliviano que ha circulado por el centro de la ciudad este mismo miércoles.

Antes de cerrar el acto, que se ha cerrado con el himno de España, un grupo de 'castellers' han levantado un pilar que ha ondeado una bandera española entre vítores y aplausos.