La agenda política de Susana Díaz en Bruselas ha quedado deslucida. La presidenta andaluza no ha conseguido concitar atención en el Parlamento Europeo, que anda revuelto este miércoles por la marcha de su presidente, Martin Schulz, que deja la eurocámara para ser candidato de la SPD en la región de Renania del Norte Westfalia. De hecho, la reunión entre ambos, centro de la visita de Díaz, se ha reducido a unos minutos en un pasillo, donde se han improvisado dos sillones y una bandera para hacer una fotografía, según fuentes presentes en el encuentro. La presidenta ni siquiera ha entrado en su despacho. El encuentro ha durado tres minutos, según las fuentes, mientras que la Junta de Andalucía lo eleva a quince minutos.

Susana Díaz visita este miércoles el Parlamento Europeo dentro de su gira para rehabilitar su imagen política, tras el desgaste sufrido por su enfrentamiento con Pedro Sánchez, al que ha conseguido derrocar. El sector de políticos de confianza de Alfredo Pérez Rubalcaba que ha ganado posiciones en el PSOE tras la dimisión de Sánchez, como Elena Valenciano y José Blanco, le han organizado una agenda de carácter político en Bruselas para que Díaz presente sus credenciales como aspirante a nueva secretaria general del PSOE.

A pesar de los elevados intereses de Andalucía en la política europea, especialmente en materia de agricultura y pesca, la presidenta sólo va acompañada de asesores de comunicación, y no por los consejeros de esos ramos. La gestión no ocupa lugar en esta visita, por lo que la oposición andaluza la acusa de utilizar la Junta en su carrera hacia Ferraz.

Tras visitar en la noche del miércoles la agrupación socialista de Bruselas, Díaz ha intervenido ante el pleno del grupo parlamentario Socialista y Demócrata, al término de su reunión. Por ese motivo, apenas quedaban unos 35 eurodiputados, 14 de ellos españoles.

Intervención de Susana Díaz ante el grupo de Socialistas y Demócratas del Parlamento Europeo. JUNTA DE ANDALUCÍA

Desde Bruselas, la presidenta ha querido enviar nuevos mensajes al presidente, Mariano Rajoy, como nueva voz del PSOE. Ha reclamado que no haya más recortes y que el Gobierno dé más margen a las comunidades en el cumplimiento del objetivo de déficit.

Díaz, firme partidaria de la abstención socialista en la investidura de Rajoy, se ha pronunciado sobre la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para reclamar que  “no se parezcan a Rajoy, es decir, que no se parezcan a los que hemos tenido años atrás” y que "tanto sufrimiento han provocado, llevándose por delante tantos derechos ". Sus declaraciones han quedado eclipasadas por la sesión de control al Gobierno en el Congreso.