"No es posible cambiar las normas, una vez que ya se ha puesto en marcha el procedimiento, o por lo menos los calendarios, y que se ha comenzado el debate de las ponencias". Con estas palabras rechazaba este miércoles la Gestora la petición de la candidatura de Pedro Sánchez de modificar el Reglamento de las primarias para incluir el voto por internet.
El portavoz y responsable de Organización de la Gestora, Mario Jiménez, hombre fuerte de Susana Díaz en el Parlamento andaluz, zanjaba así una cuestión fundamental para que el proceso tenga todas las garantías, según los sanchistas. A los problemas de afiliación que ese están encontrando las plataformas críticas se suma el aumento de fichas en agrupaciones oficialistas, con el objetivo de facilitar la llegada de militantes favorables a Susana Díaz. La propia presidenta andaluza fue la responsable de la candidatura de Carmen Chacón en 2012 que perdió frente a Alfredo Pérez Rubalcaba por sólo 22 votos. Por eso es tan consciente de que cada sufragio cuenta.
En este contexto, Jiménez aseguró que “el proceso de afiliación” al PSOE “es un proceso en cadena, en el que interviene no solo la dirección federal del partido, sino toda la estructura empezando por las agrupaciones locales” y que “nosotros vamos a garantizar que en todas las fases de ese proceso, se produzcan los trámites normales que se han producido siempre”.
El hombre de Díaz en la Gestora se niega a aceptar cambios
Asimismo, explicó que “toda la normativa” del próximo proceso de primarias “es exactamente la misma” que se utilizó en la anterior elección para la secretaría general e insistió en que tanto la Comisión Gestora, como toda la organización socialista “va a cumplir escrupulosamente” con ella.
Como informó este martes este periódico, los sanchistas reclaman una modificación del Reglamento de las primarias para permitir el voto telemático, un sistema que se estrenó en la consulta del acuerdo con Ciudadanos, en febrero de 2015. Para analizar esta cuestión y otras relacionadas con el censo, la candidatura de Sánchez ha solicitado una reunión con la Gestora.
Por su parte, la dirección provisional alega que con el procedimiento en marcha no se pueden modificar las reglas. Lo cierto es que ni el congreso federal ni las primarias están formalmente convocados, por lo que habría margen para esos cambios en el Reglamento. De hecho, así se ha producido de forma histórica.
La última Gestora que tuteló un procedimiento similar, la dirigida por Manuel Chaves y Luis Pizarro, admitió sugerencias de las distintas candidaturas, con las que mantuvo una negociación fluida. Esa dirección provisional condujo el partido hasta las primarias de 2000 que ganó José Luis Rodríguez Zapatero por nueve votos. En aquella ocasión, igual que en las disputadas por Carmen Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba, votaban sólo los delegados en el congreso federal.
Primarias improvisadas en 2014
No obstante, en 2014, el cambio fue aún mayor. Forzado por Susana Díaz tras el fracaso electoral de las europeas, Rubalcaba anunció su dimisión y la convocatoria de un congreso federal para elegir al nuevo líder. Aunque no se contemplaba en ninguna norma del partido, abogó por unas primarias abiertas a la militancia para elegir al secretario general.
Al contrario de lo que defiende ahora la Gestora, la dirección del PSOE improvisó las primarias hasta tal punto que el ganador, en este caso Pedro Sánchez, no fue formalmente elegido hasta el congreso federal posterior. Ése fue el primer punto del orden del día. El segundo fue incluir en los Estatutos el Reglamento de las primarias elaborado ex profeso.
Las modificaciones actuales de ese Reglamento para incluir otros avances como el voto telemático o la financiación de las campañas, con aspectos como el crowdfunding, son de mucha menos envergadura que la apertura de todo el proceso que tuvo lugar hace dos años y medio.
La negativa de la Gestora a esas adaptaciones que anteriormente sí se han aceptado contribuyen a dar pábulo a las acusaciones de que la dirección del PSOE rema a favor de la candidata sevillana. El control del censo y del procedimiento que realiza Susana Díaz a través de Mario Jiménez es fundamental para afrontar con ventaja procesos como éste. "Aunque haya vuelto Pedro, al menos ahora nosotros tenemos el censo. Si todavía mandara él, sería mucho más difícil ganar", explican desde el entorno de la presidenta.
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