Sucedió hace justo hoy 80 años. El 26 de abril de 1937, a las 15.45 horas, aviones de la Legión Cóndor alemana y de la legión italiana bombardeaban la localidad vizcaína de Gernika en una operación contra los sublevados contra el Gobierno de la segunda república, provocando cientos de muertos. Desde aquel bombardeo, que meses después inmortalizó Pablo Ruiz Picasso como emblema del horror de la guerra, la villa vasca ha sumado a su simbología como origen de los fueros vascos la de erigirse como localidad defensora de la paz y la reconciliación.
Con ese motivo, desde hace trece años, coincidiendo con el aniversario del bombardeo, Gernika otorga los ‘Premios por la Paz y la Reconciliación’ que en esta ocasión concederá al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos y al líder de las FARC, Rodrigo Londoño, alías ‘Timochenko’, además de al fotoperiodista, Gervasio Sánchez. El galardón pretende reconocer la labor de Santos y ‘Timochenko’ por alcanzar la paz en Colombia y poner fin a 52 años de conflicto entre la guerrilla y el Gobierno.
Arnaldo Otegi y Jesús Eguiguren también recibieron este reconocimiento por la paz y la reconciliación en 2013
Santos ya ha anunciado que no acudirá a Gernika a recibir el reconocimiento que en su nombre recogerá el Alto Comisionado para la Paz de Colombia, Sergio Jaramillo. Por su parte, la presencia de quien fuera líder de las FARC es una incógnita. Oficialmente se asegura que no acudirá y que en su nombre lo hará el abogado español Enrique Santiago, quien intervino directamente en las negociaciones de paz de Colombia. Sin embargo, algunas fuentes apuntan a la posibilidad de que finalmente ‘Timochenko’ pueda estar presente en los actos de recuerdo del bombardeo este mediodía en la villa vizcaína para recibir el galardón.
Este premio también fue otorgado hace cuatro años al actual líder de Sortu, Arnaldo Otegi, y al entonces presidente del PSE, Jesús Eguiguren, por su aportación a la paz en el País Vasco. En aquella ocasión el dirigente de la izquierda abertzale no pudo acudir a Gernika por encontrarse preso, por lo que fueron las hijas de Otegi y Eguiguren las que en su nombre recogieron el reconocimiento.
Urkullu pide "un gesto" al Gobierno español
El 80 aniversario del bombardeo de Gernika ha contado con numerosos actos de conmemoración y recuerdo. El evento ha sido aprovechado por el Gobierno vasco para reivindicar la aportación de la paz y la reconciliación como valores a preservar. El lehendakari Iñigo Urkullu, que la semana pasada visitó el campo de concentración de Auschwitz, reclamó al embajador de España en Polonia la necesidad de que el Gobierno de España lleve a cabo “un gesto” para reconocer el daño causado durante el bombardeo de Gernika. Una petición que se produjo horas después de que Urkullu plantara un retoño del Árbol de Gernika como símbolo de paz y reconciliación, a escasos metros del campo de exterminio nazi.
A las 15.45 horas las campanas de Gernika volverán a repicar como aquel 26 de abril del 37 y las sirenas antiaéreas volverán a sonar
Los actos de conmemoración previstos para hoy comenzarán con el reconocimiento al periodista George Steer, cuyas crónicas dieron a conocer al mundo lo sucedido aquella tarde en Gernika, así como la labor de otros informadores que divulgaron el horror provocado. Posteriormente, a las 12.00 horas, se celebrará el acto de entrega del XIII Premio por la Paz y la Reconciliación. A las 15.45 horas las campanas de Gernika volverán a repicar como aquel 26 de abril del 37 y las sirenas antiaéreas que avisaron de la llegada de los aviones volverán a sonar. A las 16.30 le seguirá una ofrenda floral en el cementerio del municipio en recuerdo de las víctimas del bombardeo. A última hora, los actos de conmemoración concluirán con una marcha de velas, silenciosa, por el centro de la villa foral.
A lo largo de toda la semana se han sucedido los actos simbólicos en recuerdo al bombardeo y que comenzaron el sábado pasado con un homenaje a quien fue alcalde durante el ataque, José de Labaurie, al que se dedicará una plaza. El lunes, el Centro de Documentación del Museo de la Paz de Gernika recibió un legado de testimonios de supervivientes del bombardeo recogidos por William Smalwood y ayer martes Gernika firmó la carta de amistad con la ciudad siria de Kobane.
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