"Si hubiera querido dañar a López Madrid le habría mandado fotos y audios a su mujer"

La dermatóloga Elisa Pinto negó en su declaración como testigo ante la juez que investiga su presunto apuñalamiento que hubiera recurrido a los servicios de un santero para ejercer supuestamente malas influencias sobre Javier López Madrid, del que sospechó como autor de las llamadas amenazantes que recibió en su telefóno y con el que reconoce haber mantenido una "relación sentimental de flirteo" durante tres meses en la primavera de 2012. La doctora asegura que acudió al hechicero para pedirle protección para sus hijos y no para desearle el mal al ex consejero delegado de la constructora OHL y yerno de Villar Mir.

Pinto compareció en calidad de testigo el pasado 26 de julio ante la titular del Juzgado de Instrucción 39 de Madrid después de que hubiera solicitado esta testifical el comisario ya jubilado José Manuel Villarejo, imputado en la causa tras identificarlo la dermatóloga en una rueda de reconocimiento como el supuesto autor del apuñalamiento sufrido en 2014. También figura como investigado López Madrid por acoso sexual, agresión y amenazas.

Como informó El Independiente, que ahora ha tenido acceso a la videograbación de la declaración, en las actuaciones que dirige el Juzgado de Instrucción 39 de Madrid consta la transcripción parcial de la conversación que Pinto mantuvo el 3 de junio a las 19.07 horas con una persona identificada como Antonio G.G., que, cuando prestó declaración en calidad de testigo ante la Sección de Secuestros y Extorsiones de la Brigada de Delitos contra las Personas de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Nacional el 15 de febrero de 2016, reconoció que practicaba la santería y que había recibido varias veces la visita en su casa de una mujer que dijo llamarse "Elizabeth". Esa llamada fue interceptada por el Equipo Mujer Menor (EMUME) de la Guardia Civil tras autorizar la instructora que se le pinchara el teléfono a la dermatóloga por si ésta recibía amenazas y el contenido es considerado "de interés" para la investigación.

La dermatóloga niega que acudiera a un santero para ejercer malas influencias sobre López Madrid sino para pedirle amuletos para sus hijos

Cuando declaró el pasado verano durante tres horas ante la juez Belén Sánchez, la doctora reconoció que "Antonio" era un "santero" que "hacía oraciones y obras con el fin de que todo evolucione de forma más positiva" y desgranó el motivo que le había llevado a reclamar sus servicios. "Yo le había pedido unos amuletos para mis hijos. No creo en ninguna de estas cosas, pero en aquel momento estaba realmente desesperada y recurrí a cualquier cosa que me pudiera dar sensación de protección. En aquella época me acordé de cuando Javier [López Madrid] decía que visitaba a un brujo en Navarra al que acudía con su mujer y me parecía absolutamente ridículo", aseguró.

Elisa Pinto mantuvo que nunca quiso "hacer daño" a López Madrid y que sólo pretendía que éste la "dejara en paz" tras no aceptar que la relación derivara "hacia los términos que él quería que derivase". "Si yo hubiera tenido intención de hacerle daño, con lo que hay en este sumario... Hubiera enviado los audios y fotografías a su mujer o a sus suegros; sus conversaciones sobre sus negocios de México, sus conversaciones sobre su intento de llegar a la Presidencia de Endesa. Yo no tenía intención de hacer daño; sólo quería que me dejara en paz", insistió.

Pinto insiste en que tuvo una "relación sentimental de flirteo" durante tres meses con el yerno de Villar Mir en 2012

La dermatóloga confesó haber tenido una "relación afectiva muy buena" con el ejecutivo, al que comparó con el Dr. Jekyll y Mr Hyde. "Cuando la situación no evoluciona hacia donde él quería, él busca que seamos amigos y yo acepto una relación de amistad. Pero de repente podía ser muy cordial y aceptar que se le enviasen correos electrónicos y con eso estar bien y al cabo de dos semanas presentarse de nuevo en mi despacho o en una cena. Eso resultaba muy duro cuando era alguien con el que habías tenido una relación de cariño", mantuvo.

Sin duda, el momento más tenso de la comparecencia fue durante el interrogatorio al que la sometió la fiscal, descreída de la tesis del "flirteo" que estaba defendiendo la testigo:

Fiscal.-Usted habla de flirteo. Tenemos todos en esta sala una edad... ¿Cuánto dura ese flirteo con López Madrid?
Elisa Pinto.-Unos tres meses.

F.-¿En qué consistió ese flirteo?
E. P.-Había una comunicación esencialmente por mensajes de whatsaap.

F.-¿Y ya está? ¿No se veían? ¿No quedaban?
E. P.-En alguna ocasión me han preguntado si tomé un café con él. Sólo recuerdo estando yo en La Flecha, antes de que hubiera una comunicación más fluida, que me estaba tomando un café y él apareció. No sé si de una manera casual o forzada. Es el único café o la única ocasión que yo lo he visto fuera de mi despacho.

F.-Dice que han mantenido un tonteo por whatsaap y a partir de los tres meses es cuando usted corta. ¿Usted ya no quiere ese relación o quién corta?
E.P.-A ver, yo lo que no quiero es ver invadida mi vida personal. Yo no puedo estar en una piscina con mis hijos y de repente recibir un audio o una nota de voz de contenido sexual a las 3 de la tarde. Yo no puedo estar con mis hijos cenando y recibir una fotografía desnudo. Yo no tengo por qué aceptar que la relación derive hacia los términos que él quería que derivase. Yo no puedo ir a París con una amiga a comprar y que este señor aparezca en la habitación del hotel...

F.-¿Quién corta la relación?
E.P.-No hay como un efecto cortar, sino que yo realmente digo que no a determinadas situaciones y es entonces cuando él empieza a ponerse invasivo y a adoptar una actitud más agresiva ya de carácter físico. Ya se presenta en los sitios en los que yo estoy y empiezo a tener sensación de seguimiento.

F.-Mantener un flirteo por whatsaap me parece un poco extraño...
E.P.-Bueno, serán las nuevas tecnologías.

F.-Con la edad que tenemos me parece... No sé.
E.P.-Yo sólo le puedo contar lo que ha ocurrido. Y lo que ha ocurrido es eso.

Pinto denunció el 13 de enero de 2014 que había sufrido una agresión por parte de un varón, que le habría clavado un cuchillo en su hombro izquierdo cuando se encontraba en el interior de su vehículo en la madrileña avenida del Comandante Franco. A éste habría seguido otro apuñalamiento el 10 de abril de 2014 en la avenida de Pío XII de Madrid que le habría provocado una herida incisa de un centímetro al lado del ombligo por la parte izquierda. Entre ambas, la doctora formuló diversas denuncias por llamadas amenazantes recibidas en su teléfono, asegurando ante la Guardia Civil que la persona de la que sospechaba era el hoy ex consejero delegado de OHL Javier López Madrid.

"Comidilla del hospital"

Durante su extensa declaración, en la que se oyeron fragmentos de conversaciones privadas de Elisa Pinto con terceros incorporadas a la causa, la dermatóloga insistió en que fue ella la que sufrió la invasión de su vida cotidiana en contra de lo que sostiene López Madrid, que la denunció por amenazas y acoso en una causa que se sustancia en otro juzgado madrileño. "De repente llamaban al quirófano, yo estaba operando y me decían que estaba esperándome en la puerta de mi despacho. Yo tenía que subir, con una sala de espera llena de gente, con cuatro recepcionistas... ¿Qué opción me quedaba? ¿Organizar un escándalo y al día siguiente ser la comidilla del hospital? ¿O abrir la puerta, darle conversación y esperar a que se marchase? Ésas eran las pruebas de que me estaba intimidando, agobiando... Yo estaba viviendo un infierno y estaba metida en una ratonera de la que tenía que salir. Y no sabía cómo enfrentarme a ella", señaló.

Incriminar a Villarejo

Por su parte, la defensa del comisario ya jubilado José Manuel Villarejo intentó conocer la identidad de la persona que supuestamente le habría instado a incriminarlo en esta causa. Ésta fue su respuesta: "Yo no tengo interés en incriminar a Villarejo, yo no conocía al señor Villarejo. Cuando a mí me apuñalan describo a una persona determinada cuyos rasgos ni siquiera sé con los de quién coinciden. En la época en que describo por primera a la persona que fue a mi despacho sólo sé que se puede parecer al señor Villarejo porque me lo dice mi abogado. ¿Para qué iba a incriminar al señor Villarejo? Es absurdo. ¿Para qué iba a incriminar al señor Villarejo? Yo tengo una vida profesional, tengo una vida personal y una vida profesional. Soy jefe de servicio. ¿Qué objetivo tendría incriminar a este señor? Al contrario, mi intención sería que él no estuviera implicado en este caso, porque es terrible que este señor esté implicado en este caso".

El abogado de Villarejo terminó su interrogatorio preguntando respetuosamente a Pinto si le habían diagnosticado "enfermedad mental" alguna vez y si había estado en tratamiento psiquiátrico. La doctora negó ambas cosas.