El Gobierno da por descartado poder aprobar los presupuestos generales del Estado antes de fin de año y confía en que al menos pueda hacerlo durante los primeros meses de 2018. Sin embargo, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha reconocido hoy que para ello requerirá del apoyo de más formaciones "sin descartar ninguna". Durante la comparecencia tras el Consejo de Ministros, Montoro, preguntado por la posibilidad de que el PNV no reedite su apoyo, ha llamado al PSOE a mostrar responsabilidad y apoyar al PP en la aprobación de las cuentas. El apoyo de Pedro Sánchez sería fundamental, además del de Ciudadanos, si como parece el PNV mantuviera su negativa a volver a apoyar las cuentas de Rajoy.

El ministro ha reconocido que "necesitamos el concurso del PNV" pero que el Gobierno no puede "renunciar a otros, a ninguno". A continuación ha apelado a "la responsabilidad" del PSOE al que ha alabado su capacidad para acordar y compartir "en tantas cosas", en referencia al acuerdo en la resolución de la crisis en Cataluña.

Consciente del alejamiento del PNV, el gobierno ha reconocido que no se puede renunciar al apoyo de "ninguna" formación

La llamada directa a los socialistas llega después de que el PNV se haya alejado del Gobierno de Mariano Rajoy por el modo en el que está abordando el proceso secesionista en Cataluña y en particular por la decisión de aprobar la aplicación del artículo 155. La formación de Andoni Ortuzar ha puesto distancia con el PP y con el Gobierno de Rajoy y en los últimos días ha insistido en que ahora sus aliados se encuentran en el nuevo "eje" que han conformado entre el PP, Ciudadanos y el PSOE para abordar la situación en Cataluña y del que el PNV se queda lejos. Por ello, desde la formación nacionalista insisten en que ahora debería buscar apoyo para aprobar las cuentas en las filas del PSOE y Ciudadanos.

El Gobierno aprueba los proyectos de Cupo y Concierto

En el PNV subrayan que la aprobación del artículo 155 les ha situado aún más lejos de un posible acuerdo presupuestario ya que no sería entendido por la sociedad vasca. Una medida excepcional que han descalificado no sólo desde el partido de Ortuzar sino también desde el Ejecutivo de Iñigo Urkullu. Además la distancia se ha visto agrandada tras la decisión de la jueza Carmen Lamela de encarcelar a gran parte del Govern cesado y que ha provocado que el PNV reclame la destitución "fulminante" del Fiscal General del Estado, José Manuel Maza. En el Grupo Vasco en la Cámara insisten estos días en que no se ha producido ningún avance ni contacto para recabar su apoyo y que en el actual contexto se hace muy complicado poder reeditar el apoyo de las pasadas cuentas.

La aplicación del 155 y el encarcelamiento de los 'consellers' ha agudizado la distancia PNV-PP. Los nacionalistas piden el cese del fiscal Maza

Sin embargo, en el Gobierno del PP confían en que la intensa relación mantenida en las últimas semanas entre el lehendakari Urkullu y el presidente del PNV, Andoni Ortuzar con el Ejecutivo del PP y con el propio presidente Rajoy permita reconducir aún la situación a medio plazo. Por el momento, el Consejo de Ministros ha aprobado hoy sendos proyectos de ley que ahora deberán ser ratificados en el Congreso y en el senado y en los que se plasma el acuerdo que en materia de Cupo y Concierto económico alcanzaron PNV y PP en mayo pasado. Un acuerdo que fue núcleo central del pacto alcanzado y por el cual los nacionalistas respaldaban el proyecto de presupuestos de Rajoy para 2017. Aquel pacto permitió resolver las diferencias que acumulaban en la liquidación del Cupo desde 2007 y que finalmente se acordó en 1.300 millones a repartir en cinco años. Ambas leyes entrarán en vigor el 1 de enero de 2018 tras su pasó por el Congreso, donde requerirá del apoyo del PSOE, y por el Senado, donde es suficiente la mayoría absoluta del PP.

Montoro ha asegurado que el acuerdo sobre el cupo vasco demuestra con "claridad" que el Estado de las autonomías funciona y que desde el respeto al ordenamiento jurídico "es posible impulsar y fortalecer las instituciones, la financiación y el autogobierno". Ha señalado que es posible el acuerdo cuando hay "voluntad, lealtad y respeto mutuos" y el diálogo se desarrolla dentro del ordenamiento jurídico, "en concreto dentro de la Constitución".

En el PNV y en el Gobierno vasco hacía tiempo que se había reclamado dar una respuesta efectiva al acuerdo firmado hace ya seis meses y cuya tramitación parlamentaria quedaba pendiente. Recientemente el Gobierno de Urkullu había expresado su preocupación por la demora que en la ejecución de algunos de los acuerdos alcanzados en el pacto presupuestario de mayo. Retraso y posible incumplimiento que temen que se puedan dar si finalmente el PNV no apoya los presupuestos del próximo año.