La cofundadora y diputada de Podemos Carolina Bescansa se desmarca del partido de Pablo Iglesias y presenta su propia propuesta de reforma constitucional. La dirigente ha marcado perfil propio en los últimos meses a raíz de la gestión de Podemos en la crisis catalana, con la que se mostró abiertamente crítica. Esta postura le valió su purga en la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados, donde llevaba trabajando desde su llegada al parlamento en enero de 2016. Además de experta en demoscopia, Bescansa es especialista en Derecho Constitucional del Centro de Estudios Constitucionales, y desde la creación del partido ha trabajado en el proyecto de reforma de la Constitución de Podemos; un proyecto que, tras su expulsión, asume sólo a título personal y lo presenta directamente a las bases sin pasar por la dirección del partido, a la que llama a tener en cuenta las propuestas.
El desafío aumenta teniendo en cuenta que la dirigente pide una reforma constitucional al mismo tiempo que Iglesias se ha negado a participar en la comisión para la modernización autonómica del PSOE, el primer paso para una reforma de este calado. Podemos rechazó participar en la comisión territorial de los socialistas, al considerarla "inútil" y con el único fin de "blanquear al Gobierno". En su canal personal de Telegram, Bescansa escribe una misiva a sus seguidores [consultar texto completo en PDF] en la que muestra sus diferencias con el partido y donde presenta sus propuestas de reforma y en la que firma presentándose como "diputada y fundadora de Podemos".
"Estas propuestas son deudoras de un extenso debate que sostuvimos a lo largo del 2016 un equipo de expertos constitucionalistas, economistas y juristas en el marco de los trabajos de la Secretaria de Programa y Proceso Constituyente", señala Bescansa, que perdió la Secretaría en Vistalegre II al quedarse fuera de la carrera. Las propuestas, adelantadas por El Independiente, proponen la reforma del Senado y su conversión en una verdadera cámara territorial, la clarificación de competencias y la "renovación democrática de la legitimidad del marco constitucional español". Es decir, un referéndum para aprobar una reforma constitucional que tenga una lectura territorial.
En este contexto, Bescansa reivindica por una parte su trabajo en los últimos años, y por otra reivindica el "ADN" de Podemos. "Podemos nació como una herramienta política al servicio de las grandes mayorías de nuestro país", comienza la misiva. "Cuando nacimos, quisimos convertir el debate de ideas en el ADN de nuestra organización. Por eso hoy toca someter a debate en Podemos, en todos sus círculos, en todos su órganos municipales, insulares, autonómicos y estatales, tres propuestas de cambio constitucional nacidas de nuestro trabajo político y destinadas a aportar soluciones estables a la crisis territorial española", detalla el texto. La dirigente apela directamente a la cúpula de Podemos y de Pablo Iglesias, y lo hace no a través de los órganos oficiales, sino a través de un espacio extraoficial; un gesto que evidencia su fuerte distanciamiento con el partido y su insistencia en redirigir a la formación para que convierta en útiles los cinco millones de votos que obtuvo en las elecciones generales.
"Este documento camina en esa dirección, apostando por ensanchar el debate dentro de Podemos y animando a la puesta en pie de un gran foro de diálogo ciudadano sobre el imprescindible cambio constitucional", señala la dirigente en el distribuido en su canal personal de Telegram. En la ronda de charlas que ha dado entre las bases de Podemos en las últimas semanas y con las que intenta crear una agenda propia, Bescansa ya ha insistido en esta idea, pidiendo apertura de miras en el partido. En una de esas charlas, a la que asistió El Independiente, explicó que Podemos no debe conformarse con “tener razón”, sino que debe demostrar que es capaz de “arreglar las cosas”, tal y como prometió a sus votantes. En la antesala de Vistalegre II, Carolina Bescansa ya se mostró crítica con Iglesias y con Errejón, a los que acusó de no permitir el debate fuera de los dos bandos. Ahora la política insiste en consolidar una tercera vía en el partido e intenta sumar apoyos en las bases de la organización para conformar un nuevo liderazgo en Podemos.
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