Podemos podría presentarse a las elecciones municipales de 2019 con otras siglas distintas. El partido de Pablo Iglesias, que carece ahora de estructura orgánica en pueblos y ciudades en virtud al reglamento aprobado en diciembre, buscará alianzas con otras fuerzas más arraigadas en el territorio y no descarta eliminar la marca morada de la papeleta en favor de otras plataformas electorales o candidaturas de unidad popular.
Lo ha avanzado el secretario general de la formación, Pablo Iglesias, en una entrevista en Hoy por Hoy de Cadena Ser. El dirigente ha sido preguntado por unas declaraciones de la líder gallega de Podemos, Carmen Santos Quiroga, que en los últimos días ha abogado por que las siglas de Podemos estén en todas las candidaturas municipales y atuonómicas. Iglesias no ha respaldado esta opción, ha evitado defender que sus siglas estén en la papeleta y se ha manifestado neutral, abriendo la puerta a que la marca del partido no esté presente en las municipales.
En este sentido, ha trasladado evitado mantener una posición propia y ha trasladado esta decisión a los inscritos de cada municipio a través de consultas ciudadanas. Sin embargo, con el nuevo reglamento municipal elaborado por la secretaría de Organización, estas consultas no se organizan a nivel local, sino que es Podemos a nivel autonómico -o en último caso el estatal- quien organiza estas consultas y diseña la formulación de la pregunta, que en algunos casos es determinante para el resultado de la votación entre los inscritos.
"Nosotros tomamos una decisión en Vistalegre que fue la más prudente"; ha comenzado Iglesias, para refugiarse en las decisión de sus simpatizantes. "Y esto fue que la manera de la que vamos a ir [a las elecciones] la van a decidir los inscritos de los diferentes territorios. Ahí vamos a ser laicos. Eso tiene que ser una decisión que tome en ultima instancia la gente. Me parece que Unidos Podemos es un nombre que funciona pero lo tiene que decidir la gente".
En las municipales de 2015, cuando Podemos aún se encontraba en construcción y no tenía arraigo municipal para armar candidaturas en todos los territorios, optó por apoyar candidaturas de unidad popular que, con distintos nombres, permitió al partido arrogarse conquistas como los llamados ayuntamientos del cambio en Madrid, Barcelona o Ferrol. En esta ocasión, tras el desgaste que ha sufrido la marca del partido a nivel estatal tras la crisis catalana y las bajas expectativas en las encuestas, el partido de Iglesias prepara el terreno para reeditar esta fórmula. Está dispuesto a sacrificar de nuevo su nombre y optar por opciones más cercanas al territorio para intentar así revalidar los resultados obtenidos hace tres años.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Lobato: morir matando. Por Casimiro García-Abadillo
- 2 Esto es lo que ocurre si se aplica Aloe Vera en la cara a diario
- 3 El entorno de Ayuso se frota las manos: "Lobato se ha ahorcado solito"
- 4 Los chalecos de SDLE de menor nivel que Ucrania reclamó a Italia
- 5 Silvia Intxaurrondo pasa al ataque contra Pablo Motos
- 6 En aquel Peugeot de Sánchez estaba todo
- 7 El vestido vintage de la reina Letizia el retrato de Annie Leibovitz
- 8 El rechazo a la independencia se dispara en Euskadi al 43%, la cifra más alta desde 1998
- 9 La pinza