Política

Assange: de principal agitador independentista al silencio total sobre el procés

Assange: de principal agitador independentista al silencio total sobre el procés

Uno de los tweets compartidos por Julian Assange en las horas previas al 1-O. TWITTER

Hace dos meses que Julian Assange guarda absoluto silencio sobre el desafío independentista en Cataluña. El fundador de WikiLeaks, refugiado en la embajada de Ecuador en Londres y con una orden de detención mantenida esta semana por la justicia, ya no expresa públicamente su desaforado interés por el procés. Un cambio de tercio sorprendente, teniendo en cuenta que durante semanas fue uno de sus principales dinamizadores en las redes sociales.

Sobre la incógnita arrojó luz el presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, durante su visita a España en el mes de diciembre. Desveló entonces que la frenética actividad de Assange había incomodado a la embajada, que le había obligado a firmar un "compromiso" para no interferir en la crisis catalana. "Su condición de asilado no le permite opinar sobre la política ecuatoriana ni de países amigos", sentenció.

Assange, que cuenta con más de 700.000 seguidores en Twitter, fue durante septiembre y octubre un referente del independentismo. Su actividad, especialmente en jornadas como la del referéndum ilegalizado del 1 de octubre, fue prolífica: llegó a publicar más de 100 tweets diarios relacionados con Cataluña, con una actitud absolutamente beligerante hacia el Gobierno, mostrando una simpatía indisimulada por la causa independentista y difundiendo mensajes de corte radical. Entre otras cosas, que los unionistas están "bajo la influencia del fascismo" o que "matones españoles de baja estofa apalean y abusan de forma rutinaria a catalanes pacíficos".

Assange, el cuarto activista más influyente en el 1-O

El activista australiano se dedicó durante semanas a denunciar a la "execrable" prensa española mientras enlazaba sin descanso a medios cercanos al independentismo. Su influencia sobre el relato nacionalista en las redes llamó la atención del Gobierno, que analizó al detalle la actividad social en torno al punto álgido del procés, el referéndum del 1-O.

Según los datos de un informe oficial a los que ha tenido acceso este medio, entre el 29 de septiembre y el 5 de octubre se produjeron 4.5 millones de publicaciones digitales relacionadas con el desafío independentista. Se han analizado todo tipo de plataformas, aunque el grueso de los contenidos -hasta el 79%- se compartieron a través de Twitter.

Assange publicó el cuarto tweet con mayor repercusión alrededor del 1-O. El segundo fue de Gabriel Rufián

Las cargas policiales se viralizaron en ese tiempo a un ritmo vertiginoso. De hecho, de los 25 contenidos más compartidos en este período, 23 de ellos corresponden a material audiovisual relacionado con la actuación policial. 17 vídeos y seis fotos. La mayor repercusión provino de una cuenta vinculada al independentismo escocés. Assange fue el cuarto en este particular ránking. Fue derrotado por otro 'sospechoso habitual', Gabriel Rufián, al que el informe sitúa como el segundo movilizador más relevante en el entorno independentista.

Los vídeos compartidos desde estas cuentas superaron en conjunto las 150.000 reproducciones, sólo en Twitter. Una red social en la que no escasearon los fakes. Algunos promovidos por el propio Assange. Los autores del informe destacan varios ejemplos de manipulación, como cuando el fundador de WikiLeaks se refiere a agentes de la Guardia Civil como Navy Seals desplegados por el Gobierno en Barcelona o cuando anticipa "un Tiananmen" en Barcelona durante el 1-O.

Assange, que emergió en la crisis independentista tras los atentados terroristas del 17 de agosto atacando al director de El Periódico Enric Hernández, nunca ha explicitado los motivos de su importante implicación con la causa secesionista. Tampoco de dónde han llegado sus conocimientos lingüísticos, que durante meses le han permitido tuitear en perfecto castellano y en perfecto catalán. El pasado mes de noviembre, El País desveló que un ideólogo clave en el procés, Oriol Soler, se había reunido días antes con Assange en su residencia en la embajada de Ecuador en Londres.

El propio Soler negó entonces que el encuentro tratase de preparar la campaña de comunicación de cara a las elecciones del 21-D. Días después, de hecho, llegó la visita de Lenín Moreno a España y el apagón total en los mensajes de Assange sobre Cataluña.

Salir de la versión móvil