Atrapados por las deudas de Ausbanc: Hacienda, Correos, La Caixa... y hasta IKEA

La disolución de las empresas que formaban el entramado de Ausbanc ha atrapado a diversos organismos públicos y a varios centenares de personas físicas y jurídicas, con los que el grupo mantenía deudas en el momento de solicitar el auxilio judicial. Sin actividad tras el ingreso en prisión preventiva en abril de 2016 de su presidente, Luis Pineda, el conglomerado se encuentra en fase de liquidación.

El Juzgado de lo Mercantil 7 de Madrid declaró en concurso voluntario el pasado 7 de abril a la Asociación de Usuarios Bancarios Ausbanc España, la Asociación de Usuarios de Servicios Financieros Ausbanc Empresas, la Asociación de Servicios Bancarios y Consumidores de Madrid Ausbanc Madrid, El Club de la Buena Vida SL, Producciones Zapallar SL y Estructuras y Servicios Inmobiliarios SL. Todas estaban controladas directa o indirectamente por Luis Pineda, en la cárcel desde hace casi dos años por la posible comisión de los delitos de amenazas, extorsión, estafa, administración desleal, fraude en subvenciones y organización criminal tras su detención en el marco de la Operación Nelson.

Sólo Ausbanc y Ausbanc Empresas suman 489 acreedores diferentes y una deuda reconocida de 9,69 millones de euros, según se detalla en los informes elaborados por la administración concursal y a los que ha tenido acceso El Independiente. Muchos de ellos son trabajadores de las propias empresas, que siguen sin cobrar sus retribuciones tras lograr en muchos casos que los juzgados de lo Social condenen al grupo por el impago de sus nóminas.

En cuanto a sus activos, las citadas empresas disponen de 638.229,05 euros en cuentas corrientes -bloqueadas en el marco de la investigación que dirige el Juzgado Central de Instrucción 1 de la Audiencia Nacional- y diversas inversiones financieras -principalmente acciones de relevantes compañías cotizadas, como el BBVA, Iberdrola y Banco Santander- con un valor de mercado superior a los 900.000 euros cuando se elaboraron los informes. El grupo dispone también de siete oficinas en propiedad -cinco en Madrid capital, otra en Leganés y otra en Jaén-, al tiempo que Ausbanc y Ausbanc Empresas tenía pendiente de cobrar casi 5,5 millones por diversos conceptos.

En las demandas presentadas ante los Juzgados de lo Mercantil de Madrid por su situación de insolvencia, Ausbanc España cifraba en 1.712.449,11 euros el valor de sus inversiones en empresas del grupo -concretamente en Ausbanc Empresas, Ausbanc Madrid y Ausbanc Baleares- y Ausbanc Empresas en 3.487.983,72 euros por su participación en Estructuras y Servicios Inmobiliarios SL, Desarrollos Turísticos y Sociales SL, El Club de la Vida Buena, Ausbanc Madrid y Mercado Dinero Miami, si bien la administración concursal les ha dado valor cero al encontrarse en concurso y liquidación o sin actividad.

Sólo a Hacienda y a la Tesorería de la Seguridad Social, Ausbanc y Ausbanc Empresas adeudan más de 700.000 euros

Entre los principales acreedores de ambas empresas se encuentran la Agencia Tributaria, a la que Ausbanc y Ausbanc Empresas adeudan en total 494.951,26 euros. Tampoco escapa la Tesorería General de la Seguridad Social, pendiente aún de cobrar 213.954,12 euros.

Existen otros organismos públicos que figuran en los listados de acreedores, como Correos y Telégrafos (103.987,66), Ayuntamiento de Madrid (5.366,31), Ayuntamiento de Leganés (2.141), Ayuntamiento de Barcelona (1.653), Renfe (735), Ayuntamiento de Zaragoza (270,20), el Canal de Isabel II (134,87) o la Empresa Municipal de Aguas de Sevilla (Emasesa), con 64,07 euros.

La lista de empresas privadas con las que el grupo de Luis Pineda mantiene deudas es extensa y es representativa de diversos sectores. En el bancario, encabeza el escalafón Caixabank (8.478,59 euros), seguido por Banque PSA Finance (1.008,56), Bankia (672,21) y BNP Paribas (239,58).

Sin actividad tras el ingreso en prisión preventiva de Luis Pineda, el grupo Ausbanc se encuentra en fase de liquidación

También son variados los proveedores de suministros con facturas impagadas. Así, a Telefónica se le ha reconocido una deuda de 36.717,6 euros; a Iberdrola, 5.612,55; a Endesa, 4.898,72, y a Gas Natural otros 145,03 euros. También IKEA reclama cantidades a las dos empresas concursadas: 1.703 euros, facturados en enero y noviembre de 2015 y vencidos desde abril de 2017.

No faltan tampoco empresas periodísticas en el listado de acreedores. Así, Ausbanc y Ausbanc Empresas deben 10.083,31 euros al grupo Federico Joly (editor del Diario de Sevilla y Diario de Cádiz, entre otras cabeceras andaluzas); 4.276,48 euros a la Agencia Efe; 726 euros a Promotora de Medios de Castilla-La Mancha y 484 euros a Aragón Comunicación Audiovisual.

Con todo, las deudas más abultadas son con las propias empresas del grupo. Así, Ausbanc España figura como acreedor de Ausbanc Empresas con 1.667.884,74 euros, mientras que Ausbanc Empresas adeuda a Desarrollos Turísticos y Sociales SL 1.356.312,82 euros. Entre los acreedores de Ausbanc España figura Luis Pineda Salido, presidente del grupo, por una aportación fechada el 1 de enero de 2006 por importe de 48.703,26 euros.

"Trama ilícita"

En el auto por el que transformó las diligencias previas en procedimiento abreviado, paso previo a sentarlo en el banquillo de los acusados, el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz detalla cómo Pineda lideró durante años una "trama ilícita" que tenía como finalidad desviar a empresas controladas por él mismo el dinero procedente de las subvenciones públicas y los convenios con entidades financieras a cambio de hacerles publicidad positiva en sus publicaciones. La Fiscalía pide para el líder de Ausbanc 119 años de prisión.

El instructor sitúa al presidente de Ausbanc en el primer nivel de la estructura presuntamente delictiva. Era él quien ejercía la "dirección y control" amparado por la asociación que él creó en 1986. "Es quien se encarga de presionar a las entidades en búsqueda de financiación, la cual enmascara bajo ‘convenios publicitarios’ con Ausbanc a cambio de proporcionar buena publicidad", exponía.