Los agentes, ante la nueva reunión con Interior: "Esperamos una oferta sin trucos"

El Ministerio del Interior ha citado este martes por la tarde para retomar las conversaciones sobre la equiparación salarial a los representantes de los sindicatos de la Policía Nacional y de las asociaciones profesionales de la Guardia Civil, que la pasada semana se levantaron de la mesa y dieron por rota las negociaciones al considerar "inaceptable" la oferta económica planteada.

Fuentes del departamento que dirige Juan Ignacio Zoido han confirmado a este diario que la iniciativa de la reunión ha partido del secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, que el pasado miércoles instó a los agentes a "recapacitar" y a volver a la negociación. Nieto reiteró su voluntad por seguir negociando si bien aseguró que el Gobierno ya no tenía "margen de mejora" para elevar la propuesta.

"Si nos vuelven a llamar es para avanzar en las posiciones y que las cifras se acerquen a esos 1.500 millones en que nosotros hemos cuantificado la equiparación real. Esperemos que se la ultima reunión y podamos llegar a un acuerdo que permita que los policías nacionales y los guardias civiles cobren lo mismo que los Mossos", ha declarado a este diario Juan Fernández (Asociación Unificada de Guardias Civiles, AUGC), en nombre de la unidad de acción.

Confiamos en que esta vez el Gobierno ponga sobre la mesa una oferta seria y concreta, sin más rodeos ni trucos", dicen las organizaciones

En esta línea, Ramón Cosío, portavoz del Sindicato Unificado de la Policía (SUP), reiteró la disposición del colectivo al "diálogo" y se mostró confiado en que este martes les trasladen una "oferta responsable" para que los policías nacionales y guardias civiles empiecen a ver equiparadas sus nóminas con las de Mossos y otras policías autonómicas. "Si no es así no vamos a afirmar ni vamos a asumir ningún compromiso", advierte.

Los representantes de los agentes mantienen como "línea roja" de su demanda que el Gobierno disponga de 500 millones de euros durante éste y los dos próximos ejercicios. "Esta cantidad deberá, además, estar destinada únicamente a la equiparación, por lo que no se aceptaría su reparto en otras áreas ni pérdida de derechos alguna como contrapartida, han expresado las organizaciones en un comunicado conjunto.

"[Confiamos] en que esta vez el Gobierno ponga sobre la mesa una oferta seria y concreta, sin más rodeos ni trucos. Porque los guardias civiles y los policías nacionales están hartos de buenas palabras y palmaditas en la espalda. Se trata de justicia: a mismo trabajo, mismo sueldo. La sociedad española lo tiene claro", añadieron.

Los policías nacionales y guardias civiles dejaron sentado al número dos de Interior la pasada semana después de que éste redujera a 807 millones de euros -frente a los 1.500 millones reivindicados- el coste real de la equiparación salarial con los Mossos d'Esquadra. Según los representantes de los agentes, esos 807 millones incluyen la subida -de entre el 5 y el 8 %- prevista para todos los funcionarios públicos. Los sindicatos policiales y las asociaciones de la Guardia Civil consideran que ese incremento debe quedar al margen para que el recorte de la brecha sea real, ya que de lo contrario no disminuiría la diferencia de sueldo con la Policía Autonómica.

1.500 millones, un "mantra"

Según las organizaciones, la última oferta económica consistía en 200 millones de euros en 2018, 100 millones en 2019 y otros 200 millones en 2020, lo que totaliza 500 millones. Esta cantidad representa sólo una tercera parte de la considerada necesaria para alcanzar la equiparación salarial y que Interior plasmó en un documento presentado en los consejos de la Policía Nacional y la Guardia Civil hace un mes.

Nieto, sin embargo, mantiene que la equiparación salarial con los Mossos se alcanzaría con 476,71 millones de euros en el caso de la Guardia Civil y con 331 millones en la Policía, lo que totaliza 807 millones. Tras realizar un estudio comparativo tomando como base las retribuciones de las distintas escalas y rangos en los tres cuerpos, el secretario de Estado de Seguridad concluyó que la cifra de los 1.500 millones es un "mantra" y que no se justifica en modo alguno.