Peñas catalanas del Barcelona quieren teñir de amarillo la final de Copa del Rey

Más de 40 peñas, asociaciones y grupos de animación del Fútbol Club Barcelona han lanzado un llamamiento para que los aficionados de este club que acudan a Madrid para la final de Copa del Rey del próximo 21 de abril tiñan "de amarillo" el estadio Wanda Metropolitano, para reclamar la libertad de los dirigentes independentistas encarcelados actualmente. Las entidades adheridas a esta iniciativa son, en su práctica totalidad, catalanas, a excepción de la Peña Blaugrana de Roma.

La acción llama a acudir al estadio con camisetas amarillas, que definen ahora como "el color del Barça" y mostrarlas específicamente cuando suene el himno de España en la final de la Copa del Rey, que enfrentará a Barcelona y Sevilla. La propuesta ha surgido después de que el club confirmara a todos los socios que se lo preguntaban por canales oficiales que no llevará a cabo ningún acto reivindicativo aprovechando el partido. En sus respuestas, la junta directiva blaugrana subraya que la entidad se debe mantener al margen de los conflictos políticos, aunque reitera su posición favorable al derecho a decidir y a la defensa de las instituciones catalanas.

La idea lleva movilizándose unos tres días y el comunicado ha sido distribuido a nivel global por la Confederación Mundial de Peñas, el máximo órgano de administración del conjunto de peñas barcelonistas.

Las afrentas

El comunicado de la campaña recuerda que "en 1925, en plena dictadura de Primo de Rivera, los 14.000 aficionados del Barça que llenaban las gradas del Campo de Les Corts en un partido amistoso entre el CD Júpiter y el Barcelona, aplaudieron, en el descanso, la interpretación del God Save The Queen por parte de la banda de la marina inglesa, mientras silbaron la interpretación que hicieron del himno español".

A raíz de ese incidente, subrayan, "Primo de Rivera clausuró por tres meses el estadio del Barça y todas las actividades del club 'por desafección' a España". "Nos han cerrado el campo, nos han fusilado a un presidente, nos han cambiado el nombre y el escudo, nos han multado, nos han sancionado y quieren seguir haciéndolo", continúa el comunicado relatando afrentas.

"Hoy, como aquel 1928, estamos comprometidos con la libertad de los presos políticos y de los exiliados", reivindican. "Hoy el amarillo es el color del Barça. Porque somos Barça y somos pueblo. Y como todas las calles y plazas de nuestro país, somos pueblo compartiendo este amarillo. Lo somos, y sabemos lo que tenemos que hacer", cierra el texto como aviso de movilización, aprovechando la final de este sábado y la presencia del rey Felipe VI en el estadio.