El Gobierno no tiene previsto iniciar acciones después de que el presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, haya anunciado la ruptura de relaciones con la Monarquía. "El Gobierno jamás ha hecho política con un acontecimiento como este" y no piensa hacerlo, ha anunciado en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros de este viernes la portavoz del Ejecutivo, Isabel Celáa.

En este sentido, la ministra portavoz ha destacado que el Gobierno pretende conseguir la "normalización" de las relaciones con las autoridades catalanas y que aspira a la "reciprocidad", a pesar del desplante sufrido por la Corona. "La normalización democrática que propone el Gobierno debe ser respondida por la normalización democrática que apetezcan otras comunidades autónomas", ha instado.

Para conseguir el objetivo de restituir el diálogo institucional con la Generalitat, el Gobierno ha evitado cualquier gesto de reacción al anuncio de Torra sobre el boicot a Felipe VI en Cataluña. "Será un problema no para el Rey, que no recibe por ello ningún menoscabo, sino para Cataluña, porque significará que la Generalitat no representa a la totalidad de Cataluña", ha zanjado Celáa.

La única defensa en este sentido al Jefe del Estado ha sido asegurar que el Rey "cumplió con su obligación el día que hizo su declaración solemne" a través de un discurso público el pasado 3 de octubre tras la consulta ilegal del 1-O en Cataluña.

Desbloqueo en RTVE

El Gobierno también ha aprobado este viernes un decreto ley para renovar de forma urgente y transitoria el Consejo de Administración y al presidente de RTVE, ante el vacío de poder que se produce tras la salida de José Antonio Sánchez y hasta que se elija por concurso público a su sustituto.

La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha explicado que el Congreso y el Senado tendrán que elegir en 15 días a los diez miembros del Consejo de Administración de la corporación pública, de entre los cuales se designará en un mes a su futuro presidente, "un tiempo razonable". El Congreso tendrá que elegir a seis consejeros y el Senado, a los cuatro restantes según el reparto establecido por la nueva ley: los nuevos cargos tendrán que tener el respaldo de dos tercios de las Cámaras en una primera votación o contar con una mayoría absoluta en una segunda vuelta transcurridas 48 horas.

La ministra ha afirmado que el Ejecutivo cuenta con los apoyos parlamentarios necesarios para convalidar el decreto

Celaá ha detallado que el decreto incluye una cláusula para evitar que se produzca un bloqueo en la elección de consejeros en el Senado -donde el PP cuenta con mayoría absoluta-: en tal caso, la elección de esos miembros se producirá también en el Congreso, que dispondrá de diez días adicionales para seleccionarlos. Quince días después de la elección del Consejo, las Cortes tendrán que volver a votar para designar al consejero que ocupará la presidencia transitoria.

La ministra de Educación ha afirmado que el Ejecutivo cuenta con los apoyos parlamentarios necesarios para convalidar el decreto -cuya vigencia es inmediata-, pero no ha precisado qué grupos lo aceptarán. "Podemos concluir que en un mes tendremos nombrado al presidente de RTVE y a todo su Consejo de Administración. (...) España merece tener unos medios públicos de comunicación que no estén al servicio de ninguna ideología, por muy legítima que ésta sea, y que estén al servicio del interés general", ha indicado Celaá.

La portavoz ha asegurado que esta medida viene a actuar "ante un vacío de poder" y a "resolver un problema de urgencia", y ha precisado que es "una regulación transitoria" que cesará cuando las Cortes apliquen la nueva ley de elección de cargos de RTVE, que establece que sean seleccionados mediante concurso público.

El decreto "es enteramente respetuoso con la ley en todos sus términos", ha insistido Celaá, quien ha subrayado que el concurso público "sigue su marcha". "Queremos que la ley sea desarrollada y tenga cauce", pero en tanto eso no se hace, el decreto viene a solucionar una situación "anómala, excepcional y de emergencia".