El Gobierno de Pedro Sánchez recurrirá al Tribunal Constitucional la moción aprobada en el Parlament de Cataluña por los partidos independentistas en la que se reivindica la Resolución del 9N de 2015, el texto que daba el pistoletazo de salida al 'procés' independentista y que fue anulado por el TC. La moción ratifica los “objetivos políticos” de la hoja de ruta soberanista de Artur Mas, que fijaba 18 meses para proclamar la independencia. Sin embargo, desde el Gobierno rebajan los ánimos y tratan de separar esta acción aislada del plan de diálogo de Sánchez, que se reunirá con el president catalán el próximo lunes. "Tenemos la determinación de que la reunión sea fructífera. Otros caminos de denuncia ya fueron transitados sin éxito. Ahora vamos a por un camino político", ha defendido la portavoz de Gobierno Isabel Celaá, tras la reunión del Consejo de Ministros.
El líder del PSOE cumple un mes en la Moncloa entre acusaciones en los últimos días de haberse plegado a las exigencias de ERC, que le reclamaba diálogo sobre un referéndum pactado para aprobar su decreto sobre RTVE. Una petición que la vicepresidenta de Gobierno, Carmen Calvo, materializó, comprometiéndose a dialogar sin cortapisas. El president catalán, Quim Torra, ya ha adelantado que el primer punto que propondrá a Sánchez el lunes será la autodeterminación de Cataluña. Según ha recordado, el derecho de autodeterminación que Torra ha anunciado no está contemplado en la Constitución española ni "en ninguna Carta Magna de los Estados democráticos homologables", y solo existe a nivel internacional para pueblos colonizados o vejados.
"Por lo tanto, no tiene ningún recorrido", ha aseverado Celaá.
El Gobierno mantiene la determinación de construir un camino político con Cataluña"
Con esta decisión, el presidente de Gobierno podría marcar ciertas distancias con las fuerzas independentistas, aunque la portavoz del Gobierno ha tratado en todo momento de desmarcar el cauce jurídico del político. "El Gobierno siempre actuará con firmeza y proporcionalidad, pero está determinado a seguir ese cauce político, advierte Celaá. "Esto va por un camino jurídico y la política va por otro. El Gobierno mantiene la determinación de construir un camino político con Cataluña y tenemos grandes esperanzas de que la reunión del próximo lunes salga muy bien".
"La impugnación se hace en defensa de la Constitución española"; señala la portavoz del Gobierno. "La moción incumple la Constitución y el Estatut de Cataluña", y de ahí la necesidad de llevarlo ante el TC. La iniciativa salió adelante con los votos en contra de los comunes y la negativa a votar de C’s, PSC y PP. De nada ha servido la severa advertencia de inconstitucionalidad de los letrados de la cámara leída antes del debate de la moción.
"El Gobierno insiste en su determinación política. El Gobierno tiene la firma voluntad de transitar un camino político para la mayoría, para todos los ciudadanos. Vamos con la determinación de tener una reunión que sea fructífera. Otros caminos de denuncia ya fueron transitados sin éxito. Ahora vamos a por un camino político. Estaremos en la apertura de espacios de diálogo, pero este Gobierno espera una inteligencia política por parte de Torra".
La reunión Sánchez-Torra: "Queremos resultados"
La reunión entre Sánchez y Torra ha ocupado gran parte de la comparecencia. En el encuentro se tratarán "asuntos tan importantes como tratar de reducir la conflictividad, inversiones, transferencias, y diálogo abierta". En esta cita, que se producirá el lunes 9 de julio en el Palacio de La Moncloa, "se deben obtener resultados". El presidente de Gobierno "escuchará, analizará y a partir de ahí actuará", ha defendido la ministra portavoz.
El Gobierno está dispuesto a activar la comisión bilateral entre el Gobierno de España y el Govern, tal como pidió el propio Torra. El Gobierno catalán anunció hace unos días su intención de reactivar la comisión que aborda varios asuntos: las transferencias estatales, asuntos económicos y fiscales e infraestructuras. Los resultados de la reunión, según Celaá, "se volcarán en esa comisión bilateral que ya se contempla en el Estatuto de Cataluña. Ahí se trabajaran todos los temas".
"Llevamos fuerza, ilusión, firmeza, en relación a esa reunión y esperamos la reciprocidad. Hay que trabajar en política. Esto es un itinerario, el cauce de la política. Queremos abrir caminos políticos de interés para todos los ciudadanos. Esperamos que las fuerzas políticas de Cataluña así lo entiendan y transiten el mismo espacio junto al Gobierno de España".
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