Botellazos e insultos contra una carpa de apoyo a la selección española en Barcelona

Los Mossos d'Esquadra han tenido que intervenir este mediodía en Barcelona para frenar el acoso independentista a una carpa de apoyo a la selección española que se ubica cada sábado en el centro de la Ciudad Condal. Organizada por la plataforma 'Barcelona con la Selección', desde hace años vende merchandising y recoge firmas para promover que la selección vuelve a jugar en Cataluña, una circunstancia que no se produce desde el España-Perú disputado en Barcelona el 18 de febrero de 2004.

La carpa se ubicaba este sábado en la esquina de Plaza Cataluña con la calle Puerta del Ángel, donde si sitúa el edificio del Banco de España. Es la zona en la que ha terminado también la manifestación organizada por los policías y guardias civiles de Jusapol, que ha sufrido el escrache independentista durante toda la mañana, primero en Sant Jaume, después en Via Laietana y por último en Plaza Cataluña.

En mitad de los altercados, la atención de un numeroso grupo de independentistas se ha dirigido contra la carpa, en la que en ese momento se encontraban las dos mujeres que habitualmente se hacen cargo de su montaje y organización.

Han recibido lanzamiento de botellas, insultos continuados y han visto como la carpa quedaba rodeada rápidamente. Ante la creciente tensión de la situación, los Mossos d'Esquadra se han visto obligados a intervenir y establecer un cordón de seguridad alrededor de la carpa, mientras los concentrados a su alrededor seguían gritando "fuera, fuera" y profiriendo insultos como "putas" o "payasas".

Juicio pendiente por otra agresión

Las carpas de 'Barcelona con la Selección' han sido atacadas con anterioridad. De hecho, todavía está pendiente de juicio la agresión que sufrió este mismo grupo en junio de 2016, cuando un grupo de radicales destrozó la carpa y agredió a sus responsables al grito de "os vamos a matar, putos españoles de mierda".

La Fiscalía pide tres años de prisión para los responsables por delitos de pertenencia a grupo criminal, delitos contra la integridad moral, amenazas graves, lesiones, daños y hurto. El juicio debía haberse celebrado este verano, pero fue retrasado hasta principios de enero por la incomparecencia de un abogado.

Ruth, una de las responsables de la plataforma, denuncia que la tensión es habitual, pero este sábado ha crecido exponencialmente: "Todos los sábados nos insultan, pero hoy fue horrible. Yo estoy llorando y muy nerviosa".

Tras más de una hora de escrache, y protegidas por los Mossos d'Esquadra, finalmente BCLS ha tenido que desmontar la carpa informativa y abandonar el lugar, lo cual han celebrado en redes sociales los concentrados.

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