Un año después del 1-O los Mossos d'Esquadra han perdido su aura de "policía amiga" del independentismo. Los manifestantes que esta mañana han tomado el centro de Barcelona para protestar por la marcha convocada por Jusapol en defensa de la equiparación salarial de policías y guardias civiles han acabado pidiendo la dimisión del conseller de Interior de la Generalitat, el independentista Miquel Buch, y tachando a los agentes de mossos de policía fascista.
De nada ha servido que el Departamento de Interior mirara hacia otro lado con la acampada convocada por CUP, Arran, la Asamblea Nacional Catalana y los CDR en la Plaza Sant Jaume para evitar que el corazón político de Barcelona fuera "profanado" por unos policías dispuestos a reivindicar su actuación el 1-O. Los Mossos se habían comprometido a salvaguardar la seguridad de la manifestación de Jusapol, la única hoy que tenía los permisos en regla de Interior, y ese compromiso ha comportado frenar a los antisistema dispuestos a reventar la manifestación policial con un holi festival convocado por Arran.
Las 6.000 personas que según la Guardia Urbana han atendido a la llamada de las entidades independentistas siempre han tenido un cordón policial que las separaba de los 1.800 policías que han marchado entre la Jefatura Superior de Policía de Vía Layetana y Plaza Cataluña.
Orden de no hacer detenciones
Un cordón policial que pese a las imágenes de cargas en las inmediaciones de Plaza Sant Jaume tenía órdenes de limitarse a contener a los manifestantes, sin cargar ni hacer detenciones, según algunas fuentes sindicales. En estas condiciones, la manifestación policial ha transcurrido fuertemente custodiada por la policía autonómica, que ha vetado el acceso al recorrido a los grupos independentistas que han jalonado la marcha desde las calles adyacentes.
Los peores incidentes se han producido hasta ahora en la propia Plaza Sant Jaume y la confluencia con Vía Layetana. Grupos de independentistas concentrados en la plaza de Sant Jaume la han abandonado y han accedido a la Via Laietana para llegar hasta la Jefatura Superior de Policía, punto de partida de la manifestación convocada por la asociación de policías nacionales y guardias civiles Jusapol.
?Mossos fereixen a manifestants. Alguna cosa a dir @govern? #Holinopassareu pic.twitter.com/zj0pA4Q8oz
— Arran (@Arran_jovent) 29 de septiembre de 2018
La manifestacion de Jusapol ha concluido en Plaza Cataluña, donde diversos dirigentes sindicales ha reivindicado la equiparación salarial entre mossos y agentes de Policía y Guardia Civil, motivo oficial de la concentración. Pero también han reivindicado la actuación de los cuerpos policiales durante el 1-O.
VOX pide la disolución de los Mossos
"Venimos a reconocer que ha habido un grupo importante de la Operación Copérnico que cumplió su deber, frente a los chantajes y difamaciones venimos a decir que no es verdad lo que se está diciendo, se vino a proteger el orden constitucional" ha defendido el portavoz del sindicato Natán Espinosa.
El secretario general de Vox, Javier Ortega, ha ido más allá al reclamar la disolución de la policía autonómica, a la que ha acusado de ser "una parapolicía politica al servicio del independentismo".
"Su dirección política la ha convertido en un cuerpo político que incumple sentencias judiciales y lo ha puesto al servicio de los que quieren romper España", ha lamentado Ortega para reclamar que "para seguridad de catalanes es preferible que las competencias de seguridad sean exclusivas de policia y guardia civil".
Manifestación en Sant Jaume
Los concentrados han colocado unas sillas y una mesa con una de las urnas del 1-O en el centro de la plaza y planean quedarse durante la jornada de este sábado para evitar la entrada de los policías manifestados, ha explicado el colectivo Acampada per la Llibertat a Europa Press.
A partir de las 9.30 horas han ido llegando más personas a la plaza Sant Jaume, hasta llenarla completamente, y han gritado consignas como 'independencia' y 'fuera fascistas de nuestros barrios'. Planean pasar el día organizando actos lúdicos como una 'chocolatada', mesas redondas, y un 'holi festival', previsto para las 11.30 horas y organizado por la organización Arran, "para ahogar el fascismo con pintura".
Los Mossos d'Esquadra desalojaron el miércoles la acampada en plaza Sant Jaume que organizó Acamapada per la Llibertat, que situó tiendas de campaña el 11 de septiembre con la intención de mantenerse allí hasta que se hiciera efectiva la república, aunque desde el colectivo aseguran que no se han movido, que se mantendrán indefinidamente y que "quitar las tiendas de campaña no quiere decir quitar a las personas".
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