El Gobierno negocia ya con el PP la elección de un nuevo CGPJ "paritario"

Las negociaciones entre el Ejecutivo de Pedro Sánchez y el Partido Popular de Pablo Casado para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) avanzan a buen ritmo. Según ha podido saber El Independiente, en las últimas semanas la ministra de Justicia, Dolores Delgado, y su predecesor en el cargo, Rafael Catalá, se han reunido en dos ocasiones para comenzar a pactar cómo se llevará a cabo la renovación del órgano de gobierno de los jueces.

En dichos encuentros, ambos líderes políticos, designados como interlocutores en la reunión que mantuvieron sus respectivos jefes en agosto en La Moncloa, han mostrado la firme intención de que dicha modificación se haga en plazo por “higiene democrática”.

Así las cosas, Ejecutivo y PP están trabajando por sentar las bases para la renovación del Consejo. Desde el Gobierno se ha transmitido a los populares la exigencia de que se trate de un CGPJ paritario, compuesto por igual número de mujeres que de hombres, circunstancia que se dio en este Poder Judicial pero que se vio alterada con la dimisión de la vocal Mercé Pigem en 2014. De esta forma, Sánchez apuesta de nuevo por hacer gala de que el suyo es un "Gobierno feminista". La formación de Casado, por su parte, no ha puesto ninguna objeción a dicha premisa.

Enterrar el modelo de Gallardón

Se da la circunstancia de que el actual órgano de gobierno de los jueces está integrado por nueve mujeres y once hombres. El anterior Consejo, presidido por el fallecido Carlos Dívar y por el magistrado Gonzalo Moliner, estaba compuesto por siete vocales mujeres y trece hombres. El CGPJ cuyo mandato fue 2001 y 2008, presidido por Francisco José Hernando, tan sólo tuvo a dos mujeres como vocales. En esta misma línea de actuación, el Gobierno de Sánchez quiere designar por primera vez a una mujer para presidir el CGPJ y el Tribunal Supremo, tal y como informó este medio.

Asimismo, en estos momentos,  las conversaciones que se están llevando a cabo se centran en ver cómo se vuelve al modelo de Consejo anterior a la reforma llevada a cabo por el ex ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón. La actual configuración del CGPJ, presidido por Carlos Lesmes, se ha considerado un fiasco al ser un órgano demasiado presidencialista donde hay vocales de primera –los que tienen dedicación exclusiva al integrar la Comisión Permanente- y vocales de segunda –que compaginan sus trabajos con asistencias puntuales a plenos y comisiones-, a lo que se suma la supresión de la figura del vocal portavoz.

Ahora, tanto el PSOE como el PP quieren volver al modelo tradicional donde los veinte vocales tenían dedicación exclusiva. Actualmente, en la Comisión de Justicia del Congreso de los Diputados se están tramitando 97 enmiendas a la Ley Orgánica del Poder Judicial. Fuentes parlamentarias consultadas explican que entre ellas se encuentran las presentadas por ERC y PNV para cambiar el funcionamiento interno del Consejo. Este es el debate que los grupos tienen ahora encima de la mesa y que debería ver luz verde antes del próximo mes de diciembre, fecha prevista para la renovación del CGPJ.

Sin vetos a vocales

Por otro lado, las fuentes conocedoras de las negociaciones explican que tanto Delgado como Catalá han acordado que no habrá vetos a los vocales que presenten ambas formaciones si bien no han comenzado a poner encima de la mesa nombres para la presidencia; la verdadera 'patata caliente' de esta renovación al no tener el Ejecutivo mayoría en el Congreso y el PP sí disponer de ella en el Senado. Lo cierto es que la renovación de ese órgano constitucional es de máxima importancia ya que el nuevo Consejo será el encargo de elegir al 46 por ciento del Tribunal Supremodurante los próximos cinco años.

Es decir, el siguiente CGPJ será el órgano que renovará a casi la mitad de la última instancia jurisdiccional de nuestro país: el mismo tribunal que asume las investigaciones contra políticos aforados o revisa los decretos- leyes aprobados por el Consejo de Ministros. Y el papel del presidente, sin lugar a dudas, es fundamental en estas cuestiones.

Aunque por ahora ni Gobierno ni PP han desvelado sus cartas el Ejecutivo piensa en una mujer como presidenta del Poder Judicial. El nombre de las magistradas del Tribunal Supremo, Lourdes Arastey, Ana Ferrer y Pilar Teso suenan con fuerza pese a que “todavía es pronto para saber quién presidirá el nuevo Consejo”.