Pablo Casado se mostró este martes optimista ante el futuro del PP. Lo hizo primero durante la reunión de su ejecutiva y, más tarde, en un almuerzo con el Comité Autonómico popular, que reúne a los presidentes autonómicos y líderes regionales del partido. Dice Casado que "las encuestas internas nos dan bien, por encima del PSOE" aunque aún lejos de los resultados que su antecesor en el cargo, Mariano Rajoy, consiguió en las últimas elecciones generales.
Contra los datos del CIS de José Félix Tezanos que habla de una ventaja de hasta diez puntos de Pedro Sánchez sobre Casado, el líder popular insiste en que el PP está en primera posición en un proceso de recuperación lento pero constante que se inauguró tras el XVIII congreso popular, el mismo que le encumbró en julio pasado al liderazgo del partido. Desde el entorno del presidente del PP señalan a El Independiente que "las encuestas son como las meigas, que haberlas, hailas".
Están todavía lejos del 33 por ciento y los 137 escaños de Rajoy
En todo caso, la satisfacción no es completa porque parecen aún muy lejos del 33,01 por ciento y los 137 escaños que Rajoy cosechó en 2016 con un PSOE hundido en el 22,63% y 85 diputados contando con el de Nueva Canarias, Pedro Quevedo. Aunque los populares insisten en que están preparados para cualquier eventualidad electoral en caso de que Pedro Sánchez decidiera de manera sorpresiva disolver las cámaras, necesita Casado tiempo para consolidar su liderazgo.
El tiempo que no tiene para meterse en unas autonómicas andaluzas donde vuelve a transmitir un mensaje de esperanza a los suyos, porque si bien no llega a la osadía de afirmar que van por delante de Susana Díaz, sí ha trasladado la idea de que no hay sorpasso posible de Ciudadanos sobre ellos además de la posibilidad de sumar fuerzas con los naranjas para descabalgar a la socialista de la Junta de Andalucía. En este caso, afinan algo más: el PSOE-A ha bajado 6 puntos de intención directa de voto frente a los entre dos y tres que sube el PP.
El PSOE baja 6 puntos en Andalucía
Dicen desde Génova que esto es la muestra de una revitalización del partido, capaz de "reilusionar y reconectar a un montón de gente" que le había dado la espalda, pero no sólo desde el flanco derecho sino también desde el centro liberal. No ha citado Casado en su intervención ante el comité ejecutivo a la formación de Santiago Abascal, Vox, tampoco el resto de los intervinientes, esto es, Teodoro García Egea; el candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, y el nuevo presidente de los populares castellano manchegos, Francisco Núñez.
Precisamente este último ha hecho un recordatorio a los triunfos electorales de María Dolores de Cospedal en Castilla-La Mancha, lo que ha sido respondido por un cerrado aplauso, aunque tampoco se ha suscitado la posibilidad de su candidatura a la alcaldía de Madrid, que promueve, entre otros, el ex ministro de Justicia Rafael Catalá con su conocimiento.
Génova retrasa un mes la designación de candidatos por el calendario andaluz
La incógnita sobre el destino de Cospedal, además del resto de las candidaturas a capitales de provincias y comunidades autonómicas, no se despejará en breve. La idea inicial de la planta séptima de Génova era tener la cuestión resuelta para la convención nacional del partido de los días 1 y 2 de diciembre. Una vez que dicho cónclave se ha retrasado al 18, 19 y 20 de enero para no hacerle coincidir con las andaluzas, no se decidirán los cabezas de lista entre diciembre y principios de enero.
No ha habido objeciones a este anuncio a pesar de que muchos de los barones territoriales querían adelantar las designaciones para poder empezar a hacer precampaña. El problema no afecta tanto a los aspirantes autonómicos -puesto que salvo en Madrid y en alguna comunidad pequeña se va a optar por la continuidad de los que ya ejercen de presidentes autonómicos o de líderes regionales- como a los "alcaldables".
Génova anuncia sorpresas, renovación e independientes, pero sin ninguna concreción. El compás de espera lo marcan las andaluzas y el grado de implicación que Casado ha exigido a todo su partido, empezando por él mismo. Sólo en precampaña, entre el próximo sábado y el 13 de noviembre, acudirá diez veces a Andalucía, en actos con Juan Manuel Moreno. A partir de ese momento hará una caravana en paralelo al candidato "para llegar a todos los sitios".
Sigue Casado el modelo de Rajoy en Galicia con Alberto Núñez Feijóo, que tan bien les fue. Sabe el líder del PP que necesita salir bien parado del primer envite electoral de la carrera de obstáculos en que se ha convertido este curso político.
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