Casado encarga a la nueva fundación del PP organizar la convención nacional

El líder del PP, Pablo Casado, ha encargado a la nueva fundación del PP, Concordia y Libertad, organizar la convención nacional del partido, que tiene previsto celebrarse en enero de 2019.

Casado ha presidido en el Congreso la reunión del patronato de la fundación en la que ha sido elegido presidente Adolfo Suárez Illana y ha recalcado que esta institución tiene que ser el "germen de ideas" en el que luego se base el partido para sus programas electorales.

Por eso, tras la reunión ha explicado a los periodistas que el "primer mandato" que da a la fundación es organizar la convención nacional, porque esa cita debe ser el "mejor foro" que tenga el partido para debatir las ideas "innovadoras" con las que elaborar después sus propuestas electorales para las municipales, autonómicas, europeas y generales.

Esta fundación, ha dicho Casado, "será heredera de las fundaciones con tradición en el PP" y espera que se convierta en el espacio en el que "el centro derecha liberal conservador tenga su sitio".

Así, ha señalado que Concordia y Libertad debe aspirar a tener "los estudios económicos que abanderó la FAES, la profundización en las instituciones de la Fundación Cánovas del Castillo, la vertiente internacional atlantista de la Fundación Popular Iberoamericana y el estudio de las políticas públicas de solidaridad, Estado del bienestar y cooperación internacional de la Fundación Humanismo y Democracia".

Casado se ha felicitado con el nombramiento de Adolfo Suárez Illana, porque en su opinión "no hay nadie en España" que ejemplifique, por su "legado personal" -como hijo de Adolfo Suárez- y su "ejercicio profesional y político brillante", las dos palabras que lleva el nombre de la formación, concordia y libertad.

Además de la organización de la convención nacional, Pablo Casado ha encargado a la nueva fundación "recuperar los seminarios y puertas abiertas a los mejores expertos en todos los ámbitos", desde el jurídico hasta el de defensa, revolución digital, fiscalidad, pensiones o política sanitaria, entre otros.

Por su parte, Adolfo Suárez Illana, ha anunciado que deja formalmente toda su actividad para dedicarse por entero a la presidencia de la fundación, porque cree que es la mejor manera de colaborar con la sociedad, especialmente en un momento en el que considera que la concordia y la libertad -tal y como se concibieron en la Transición- están "amenazados".