Un año sombrío para Podemos. Irene Montero ha dibujado 2019 como una época de desilusión en la sociedad española. En su primer mensaje del año a su vuelta del permiso de maternidad y después de sus breves apariciones en manifestaciones feministas, la número dos del partido hace un balance de 2018 y decreta que "son tiempos de incertidumbre y de falta de ilusión por el futuro". Tras seis meses fuera de la escena pública, Montero hará efectivo su regreso el próximo miércoles 9 de enero con un acto en Madrid, pero ha querido anunciar su reaparición en un escrito a sus seguidores, en el que saca pecho de los logros de Podemos y alerta de la amenaza de Vox, a quienes define como "los odiadores profesionales" que "han reaccionado violentamente ante el empuje democrático de España". En este sentido, anima a los suyos a continuar las movilizaciones en las calles y advierte: "Sabemos que no va a ser fácil".
"En estos días me reincorporo al trabajo después de unos meses de permiso de maternidad", comienza la misiva de Montero, publicada en la red social de Facebook, donde hace una referencia directa al nacimiento de sus hijos, en línea con los mensajes más personales lanzados en las últimas semanas por el secretario general de la formación, Pablo Iglesias. "Cuando di a luz, España acababa de demostrar de nuevo que sí se podía", escribe Montero, en referencia al aumento de las pensiones y al triunfo de la moción de censura de Pedro Sánchez.
"Los de siempre habían insistido: 'no hay dinero para pensiones mejores' (...), pero nuestros mayores demostraron que el dinero para subir las pensiones existía y que se podía incluir en los presupuestos ¡del PP! 'por arte de magia' (por arte de calle y por arte de lucha)", señala Irene Montero, antes de arrogarse el éxito de la moción de censura de Sánchez. "Pensionistas, mujeres, trabajadores y trabajadoras en huelga… juntos también sacábamos adelante una moción de censura cuya semilla había plantado Unidas Podemos en 2017 y de la que los de siempre -incluso el PSOE- llevaban más de un año diciendo que jamás saldría".
Echar al PP era sólo el principio, pero los diputados solos no podemos", reconoce Montero
"En estos meses hemos arrancado al Gobierno los Presupuestos Generales del Estado más sociales de las últimas décadas", presume Montero, que repasa algunas de las medidas pactadas entre Iglesias y Sánchez. "¿Es todo esto suficiente? No, no es más que el principio". En este sentido, la portavoz parlamentaria fija retos para este año y afirma que "sabemos que, aunque nos digan que no se puede, el SMI puede subir hasta los 1.000 euros". "Sabemos que queda todo por hacer, que echar al PP era sólo el principio; pero los diputados solos no podemos", advierte Montero, que ya reconoció hace algo más de un año de la falta de utilidad de las instituciones frente a las movilizaciones callejeras. Ahora la diputada vuelve sobre este punto e insiste en la necesidad de "los pensionistas en la calle" y "las mujeres en pie de lucha".
"Y sabemos que no va a ser fácil. Es más: los odiadores profesionales han reaccionado violentamente ante el empuje democrático de España. Ayer, sin ir más lejos, VOX anunciaba que su condición para apoyar a PP y Cs en Andalucía es eliminar las ayudas económicas imprescindibles para combatir la violencia machista", relata Irene Montero. "Sé que son tiempos de incertidumbre y de falta de ilusión por el futuro. Muy poca gente sabe con seguridad que trabajará el mes que viene, que cobrará un salario digno", continúa la dirigente. "Ante esa incertidumbre, los de siempre vienen a caballo a decirnos que la solución es odiar. Odiar a las mujeres, a quienes vienen de otro país, a quienes no aman como ellos creen que se debe amar. Serviles con los poderosos, y agresivos y rabiosos con quienes consideran más débiles", critica la portavoz de Unidos Podemos.
"Ante la incertidumbre y la falta de ilusión, hay otra opción mejor: cuidarnos, protegernos, demostrarnos que la vida merece la pena y que «democracia» significa que tenemos el poder de cambiarlo todo hasta acabar con la desigualdad y la injusticia", asevera Montero, que defiende que "solo protegiendo lo común se pueden afrontar las cosas que de verdad importan". "Y la política debe servir para proteger y fortalecer lo común. Esto, poner la vida en el centro, es lo que propone el movimiento feminista", reseña la dirigente, antes de anunciar el acto en el que reaparecerá oficialmente el próximo miércoles, donde "vamos a juntarnos cientos de mujeres, pensionistas, militantes, activistas, trabajadoras, cuidadoras... para decirles a los odiadores profesionales que ya no nos pueden parar y que, aunque insistan en que es imposible, sabemos que sí se puede".
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