El fiscal pide inhabilitar 15 años al juez que investigaba a la antigua cúpula del baloncesto

La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha abierto juicio oral contra el magistrado Juan Antonio Toro por presuntos delitos de prevaricación y revelación de secretos en su investigación al ex presidente de la Federación Española de Baloncesto (FEB) José Luis Sáez.

El fiscal solicita una condena de inhabilitación especial de 15 años para Toro, magistrado señalado también por, supuestamente, haber ofrecido ayuda al ex presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) Ángel María Villar apenas una semana antes de que fuera detenido en el marco de la operación Soule.

Fuentes jurídicas y fiscales han confirmado a Efe la apertura de juicio oral contra Toro tras la instrucción realizada por el magistrado Jesús María Santos Vijande a raíz de una querella de uno de los antiguos directivos de la Federación de Baloncesto a los que investigó. El procedimiento sigue en fase de instrucción, a la espera de que un perito de la Agencia Tributaria aporte el informe requerido por la juez sobre los movimientos económicos relacionados con la celebración de la Copa del Mundo 2014.

Los hechos ocurrieron cuando el magistrado era titular del Juzgado de Instrucción 36 de Madrid, desde el que investigó presuntas irregularidades del equipo de Sáez al frente de la Federación de Baloncesto a raíz de una auditoría ordenada del Consejo Superior de Deportes (CSD) cuando lo presidía Miguel Cardenal tras la denuncia presentada por el Comité de Auditoría y Control de la FEB.

El TSJM procesa al magistrado Juan Antonio Toro como posible autor de delitos de revelación de secretos y prevaricación

Toro, que ahora es magistrado de la Sección 23 de la Audiencia de Madrid, autorizó en 2017 entregar una copia de las diligencias al ex presidente de la Federación Española de Tenis (FET) José Luis Escañuela, que no estaba personado en el procedimiento pero cuya querella contra Cardenal fue determinante para que el juez Toro imputara a los dos máximo responsables de la anterior cúpula de la FEB: José Luis Sáez y el secretario general-director económico, Luis Giménez.

Escañuela se querelló contra Miguel Cardenal tras su inhabilitación, lo que derivó en una investigación que realizó el propio Toro y que archivó en 2016. El acceso a las diligencias del caso Sáez le permitiría fundamentar su recurso a ese archivo.

La mano derecha de Sáez en la Federación de Baloncesto, Luis Giménez, se querelló contra el juez, que ahora será juzgado y se enfrenta a una petición de la Fiscalía de 15 años de inhabilitación y de 5.400 euros de multa por un delito de prevaricación y de suspensión de empleo durante dos años y 4.500 euros de multa por otro de revelación de secretos.

Querellas, recusaciones...

La querella contra Toro que ahora ha prosperado fue inadmitida por la Sala de lo Civil y Penal del TSJM el 13 de septiembre de 2017 al entender los magistrados por unanimidad que las irregularidades que se atribuían al juez no constituyen delito alguno. El ponente fue Francisco Javier Vieira Morante.

Tanto Giménez como Sáez habían intentado apartar a Juan Antonio Toro como instructor del caso en el que ambos están imputados, contra el que promovieron dos incidentes de recusación, dos quejas ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y la querella inicialmente inadmitida.

No ha sido el único caso de Toro relacionado con el deporte. En 2012 archivó una querella contra Ángel María Villar por fraude en la convocatoria de elecciones en la Federación de Fútbol, fue fotografiado por la Guardia Civil saliendo de un restaurante con Villar poco antes de su detención, según publicó El Mundo.

El organizador de dicha comida fue el ex presidente de la Federación de Fútbol de Madrid Vicente Temprado, quien en una conversación con Villar pinchada por la Guardia Civil situó a Toro entre un grupo de personas que estaban "incondicionalmente" a disposición del entonces presidente de la Federación Española de Fútbol.