Política

El sector del taxi avisa al nuevo Gobierno andaluz: 'sobran' más de 1.500 licencias VTC

La federación que aglutina al 90% del sector en Andalucía pide reunirse de forma urgente con la nueva consejera de Fomento pero descarta a corto plazo la convocatoria de movilizaciones similares a las que el gremio está secundando en Madrid y Cataluña

Moreno Bonilla saluda este martes a Marifrán Carazo, nueva consejera de Fomento de la Junta de Andalucía. | EFE

La organización que representa al 90 % de los taxistas en Andalucía ha pedido una reunión urgente al nuevo Ejecutivo autonómico ante la "grave y convulsa" situación que vive el sector, que está secundando movilizaciones en Madrid y Cataluña ante lo que consideran "competencia desleal" por parte de los VTC (Vehículos de Transporte con Conductor).

La Federación Andaluza de Autónomos del Taxi (FAAT) quiere sentarse "a la mayor brevedad posible" con la nueva consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Marifrán Carazo (PP), a fin de exponerle la "crítica situación" del gremio y que se dé solución a las reivindicaciones que habían planteado sin éxito al gobierno de la socialista Susana Díaz.

"El sector del taxi no quiere movilizaciones en Andalucía, no quiere molestar al usuario. Confío en que, en una o dos semanas, se pongan en contacto con nosotros para sentarnos a hablar", declara a este diario Miguel Ruano, presidente de la FAAT. No obstante, la Asociación Élite Taxi Sevilla -no integrada en esta federación- ha convocado este jueves a una asamblea a sus socios y simpatizantes junto al Estadio de la Cartuja para informar "sobre los últimos acontecimientos" y comunicar "los siguientes pasos a seguir".

En su escrito a Carazo, al que ha tenido acceso El Independiente, la federación denuncia el incumplimiento de la proporción de un vehículo VTC por cada 30 taxis, por cuanto -aludiendo a un informe del Ministerio de Fomento fechado el pasado 3 de enero- existen en Andalucía 9.029 taxis y 1.869 autorizaciones VTC. Ello arroja un ratio de uno cada cinco, por lo que sobrarían 1.568 licencias para que se cumpla la limitación reintroducida en 2015 y avalada por el Tribunal Supremo a mediados del pasado mes de julio.

La federación que aglutina al 90 % del sector en Andalucía pide reunirse con la nueva consejera de Fomento "a la mayor brevedad"

Según Ruano, las VTC en Sevilla equivalen ya al 10 % de la flota de taxis y suman cerca de un millar en la provincia de Málaga, pronosticando que las autorizaciones seguirán aumentando "mes a mes y de forma progresiva" hasta alcanzar las 2.500 licencias en el conjunto de la comunidad.

De acuerdo con las últimas cifras conocidas, Andalucía es la tercera región con mayor número de autorizaciones para explotación de VTC, tan sólo superada por Madrid (6.252) y Cataluña (2.171). "Se están echando jornadas de 14 horas para sacar 90 euros. El problema es igual en todos sitios, pero quizá aquí las connotaciones son más graves", sostiene el presidente de la FAAT.

En línea con el compromiso arrancado por el sector a la Generalitat de Cataluña, la Federación Andaluza de Autónomos del Taxi pretende que el Ejecutivo de Moreno Bonilla establezca un margen de precontratación mínimo para las VTC de media hora, dejando la puerta abierta a los ayuntamientos para que este margen pueda incrementarse hasta la hora.

Registro previo

Entre otras reivindicaciones, el gremio exige también que sea una realidad la web en la que el conductor de VTC registre el servicio a prestar antes de dirigirse a recoger al cliente a fin de facilitar la labor de control por parte de los servicios de inspección de la Junta de Andalucía. "No son taxis pero están trabajando como taxis", denuncia Ruano.

La FAAT también demanda la creación de una aplicación que incluya las tarifas oficiales que operan en las capitales de provincia y principales municipios andaluzas, de modo que el taxista pueda ofrecer al cliente también la posibilidad de garantizar un precio antes de que se inicie la carrera -como Uber y Cabify- con independencia de la tardanza del servicio. La Junta de Andalucía dio los primeros pasos la pasada legislatura, pero la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones han retrasado su puesta en marcha.

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