Podemos gastará en la campaña del 28A medio millón de euros más que en 2016

Podemos incrementa su presupuesto para esta campaña electoral respecto a las últimas generales pese a que aspiran a perder entre un tercio y la mitad de su representación institucional, según todas las encuestas. El partido de Pablo Iglesias ha presupuestado sus gastos en este periodo en 4,5 millones de euros, frente a los 3,9 millones que gastó en la campaña del 26J en 2016. De esa cifra, una tercera parte se sufraga mediante financiación por microcréditos que se devolverán una vez que el partido reciba las subvenciones correspondientes.

El presupuesto total se destinará principalmente a costear el 'mailing' electoral, los actos del partido en las diferentes provincias y la publicidad. Este presupuesto es el resultante de la suma de lo recaudado con la campaña de microcréditos de Podemos (a día de hoy ha recaudado 1,48 millones), de los ahorros de la propia formación morada, del adelanto de la subvención del Estado (que puede ser de un máximo del 30% antes de las elecciones) y de lo que aporten a la campaña tanto Izquierda Unida como Equo, con los que confluye Podemos.

La formación confirma así que no financian la campaña con créditos bancarios. De hecho en el programa electoral incluyen que impulsarán una reforma para que los partidos políticos que concurran a elecciones no puedan pedir créditos bancarios para costear la campaña electoral y se financien mediante microcréditos que sean luego devueltos a los donantes. Exigen así al resto de partidos adoptar su sistema de financiación, pese a las lagunas que detectó el Tribunal de Cuentas, que pidió la regularización de este método.

A esto, suman que ni Izquierda Unida ni Equo aportan fondos que provengan de créditos bancarios ya que en el acuerdo de confluencia se comprometían a que no puedan financiarse con la banca. En la campaña de 2016 Unidos Podemos declaró unos recursos de 3,9 millones, que se desglosaron en 843.000 en concepto de adelanto de subvenciones, y 3,12 millones aportados por el propio partido.

La formación de Iglesias aumentó ostensiblemente su patrimonio con la llegada a las instituciones gracias a las subvenciones públicas derivadas de su representación parlamentaria. En su primer año completo en la vida institucional, en 2017, Podemos aumentó su patrimonio en un 27% según los informes de cuentas anuales remitidos por el partido al Tribunal de Cuentas y publicados por este periódico.

La formación de Pablo Iglesias lleva desde 2017 sin actualizar su información económica en su portal de Transparencia, pese a que uno de sus argumentos más recurrentes es que sus cuentas son públicas. A final de 2017, Podemos tenía un patrimonio total de casi 22 millones de euros, frente a los 16 millones con los que cerró el ejercicio de 2016. Una cifra que con toda seguridad se habrá multiplicado a día de hoy, aunque el partido no ofrece cifras al respecto.