La Policía de Sri Lanka ha detenido este lunes a 24 personas por su presunta relación con la ola de atentados ocurridos este Domingo de Resurrección en Sri Lanka y que se han saldado con 290 muertos y más de 500 heridos.

Este domingo la Policía ha detenido a un total de 13 sospechosos que podrían tener conexión con estos atentados, según informa el diario NewsFirst. Las autoridades han localizado una furgoneta que podría haber trasladado los materiales explosivos y la casa donde podrían haberse alojado los responsables de este ataque en las afueras de la capital del país, Colombo.

A última hora de este domingo, las fuerzas de seguridad han encontrado un artefacto explosivo cerca del aeropuerto y lo han desactivado. Por el momento nadie ha reivindicado la responsabilidad del ataque. El presidente del país, Maithripala Sirisena, que estaba en el extranjero cuando ocurrieron los ataques, ha convocado una reunión del consejo de seguridad nacional a primera hora de este lunes. El primer ministro Ranil Wickremesinghe asistirá a este encuentro, según han confirmado fuentes oficiales a Reuters.

El Gobierno también bloqueó el acceso a Facebook y Whatsapp, lo que dificultaba el acceso a la información

Las fuerzas de seguridad del país han hecho guardia esta noche frente a los principales hoteles y decenas de personas han regresado a sus hogares tras el levantamiento de las restricciones. El Gobierno también bloqueó el acceso a Facebook y Whatsapp, lo que dificultaba el acceso a la información. Más de un centenar de personas han muerto solo en una explosión, la ocurrida en la Iglesia de San Sebastián, en la ciudad de Negombo, al norte de la capital. Otra treintena de personas han fallecido en la explosión de la Iglesia de Sión, en Batticaloa (provincia oriental del país). La tercera detonación ha ocurrido en la iglesia de San Antonio, en el distrito de Kotahena, en la capital, Colombo, y ha dejado al menos medio centenar de fallecidos.

Los tres hoteles afectados son el Cinnamon Grand, el Kingsbury y el Shangri-La, todos ellos en la capital, Colombo, y todos de categoría cinco estrellas. Cuatro horas después ocurrieron otras dos explosiones. La primera, en el jardín zoológico nacional de Dehiwala, a 10 kilómetros al sur de Colombo, que ha dejado al menos dos policías fallecidos, según han confirmado fuentes médicas.

La octava explosión del día sucedió en el barrio residencial de Dematagoda, en el este de la capital, Colombo, cuando policías que investigaban los atentados contra los hoteles siguieron a un sospechoso hasta una casa donde fue detonado el explosivo. Tres policías han muerto. La deflagración no ha impedido sin embargo la detención de tres individuos que están ya siendo interrogados, según ha explicado el portavoz de la Policía Ruwan Gunasekara.