Pablo Iglesias centrará su campaña sólo en Madrid y en las elecciones europeas

Pablo Iglesias se olvida de los territorios y centrará en la capital su campaña para los comicios del 26 de mayo. El aparato estatal de Podemos ha decidido volcar todas sus fuerzas en su candidatura a la Comunidad de Madrid y a Europa, dejando a las federaciones que diseñen sus propias campañas. Esta decisión llega después de los sonados desencuentros entre la dirección estatal y los líderes autonómicos del partido, que en los últimos días han cuestionado la estrategia de la cúpula de Iglesias en las generales y que temen verse salpicados por la gestión hecha desde Madrid de los malos resultados el 28A, por los que pasa de 71 a 42 diputados.

El pasado lunes, los dirigentes territoriales se reunieron de espaldas a la dirección para analizar el escenario tras las generales y en la antesala de las autonómicas y municipales. Además de la oposición de la federación andaluza al intento de Iglesias de colocar a los suyos en el Gobierno de Pedro Sánchez, se une el cuestionamiento generalizado de los territorios, que creen que el diseño de la campaña estatal y la estrategia posterior de echarse en los brazos del PSOE podría restar apoyos a Podemos en sus federaciones.

Pablo Iglesias abrió ayer la campaña del 26M junto a la candidata de Podemos a la Comunidad de Madrid, Isa Serra, y la de Europa, María Eugenia Rodríguez Palop. Ambas candidaturas fueron diseñadas in extremis: la de Serra se configuró a contrarreloj -y después de varios intentos fallidos- tras el lanzamiento de Más Madrid por parte de Iñigo Errejón; la candidata europea, por su parte, fue nombrada a dedo por el líder del partido, un viejo amigo, después de que dimitiera del cargo Pablo Bustindyu, que era el cabeza de lista electo tras pasar por las primarias.

Además de lo improvisado de sus candidaturas, ambas dirigentes comparten otro factor: son grandes desconocidas para el público en general. Es por eso que el núcleo duro de Podemos se volcará por darles a conocer a través de actos de cercanía y pequeño formato. La candidatura de Serra, que se enfrentará en las urnas a Errejón, está dirigida desde la cúpula de Madrid, y será Juanma del Olmo, secretario de Comunicación de Podemos y pareja de la candidata, el que lleve las riendas de la campaña. Mientras la cúpula se centra en apoyar a las dos candidatas nombradas a dedo, el partido dejará al margen de su ruta al resto de federaciones territoriales, que tendrán que organizar la campaña electoral por su cuenta y sin el apoyo y la infraestructura del partido a nivel estatal.

La excepción que confirma la regla se producirá este sábado en Barcelona, donde el secretario general de Podemos participará en un acto junto a Ada Colau, Lucía Martín y la periodista Cristina Fallarás, que también se integra en su lista. La edil de Barcelona se juega el 26M revalidar uno de los pocos ayuntamientos del cambio que permanecen fieles a Iglesias, después del portazo de Manuela Carmena en Madrid o el divorcio de Podemos con sus marcas blancas, como la que gobierna en Zaragoza o Ferrol. Un feudo que Colau podría mantener pese a la fuerte subida del candidato de ERC, Ernest Maragall, que se encontraría en empate técnico, según el CIS.

Iglesias acudirá a Nou Barris para tratar de recuperar los votos perdidos en el cinturón rojo de Barcelona que faciliten la victoria de Colau; la última vez que acudió a Cataluña fue en la campaña de las generales. No participará en cambio en las campañas del resto de ayuntamientos del cambio, y ni siquiera apoyará explícitamente a la que en 2015 fuera su candidata, Carmena; incluso dentro del partido hay corrientes que apuestan por brindar un apoyo soterrado a su rival en la ciudad de Madrid, Carlos Sánchez Mato.