El Gobierno contempla "todos los escenarios posibles" tras la sentencia del procés, una vez que se conozca, muy probablemente este lunes, las penas a los que serán condenados los dirigentes del PdeCat y de ERC, juzgados en el Supremo, por los delitos de sedición y malversación. El jefe del Ejecutivo ha hecho estas consideraciones durante la recepción en el Palacio Real con motivo del 12-O. En conversación informal con los periodistas, Pedro Sánchez ha recordado los apercibimientos del Constitucional "en cuanto a las consecuencias de no respetar las sentencia", con la mirada puesta en el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y en el Parlamento catalán, con Roger Torrent, al frente. "Ellos tendrán que decidir cómo actúan", ha agregado el jefe del Ejecutivo.
Y en cuanto a la respuesta que pueda haber en la calle a la sentencia asegura que "todo está previsto". Llegado el momento se echará mano "de mecanismos ordinarios" en coordinación, "muy buena", con la policía autonómica y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, cuyas plantillas se han reforzado estos días en Cataluña. "Firmeza democrática, proporcionalidad y unidad" será la receta a aplicar respetando, "por supuesto", el derecho de manifestación.
"Haz lo que debas hacer", le ha traslado Casado a Sánchez
Sánchez comparecerá ante la prensa una vez se conozca el contenido concreto de la sentencia y las penas impuestas a los 12 dirigentes del procés juzgados por el Tribunal Supremo. En todo caso, ya se ha asegurado el apoyo del primer partido de la oposición, con cuyo líder, Pablo Casado, ha podido departir durante la recepción. "Haz lo que debas hacer que tienes red". Así ha resumido Casado su respaldo al Gobierno en la respuesta que dé al independentismo tras la sentencia del procés. Partiendo de la base de que la movilización en las calles catalanas "no va a ser para tanto", la idea de su partido es "apoyar en todo" lo que tenga que ver, para empezar, con las medidas de seguridad pública.
Casado también ha hecho estas consideraciones en un corrillo con periodistas en una recepción que ha estado marcada por la sentencia del procés, de la que se conocía en la mañana de este sábado festivo que será por sedición y malversación, como ya se venía apuntando desde hace días.
Con la presencia en la recepción de un disgustado Marchena, al que algunos dirigentes políticos han dado las gracias "tras meses de presiones durísimas", según ha relatado uno de ellos a El Independiente, Casado ha subrayado que ya transmitió ese apoyo a Sánchez "hace tiempo" y que ahora queda por ver qué hace, por ejemplo, el presidente del Parlament. De hecho, los populares quieren dar una respuesta modulada y no alimentar la confrontación con este asunto. Es más, creen que la sentencia "tendrá un efecto balsámico" puesto que los independentistas "se pensarán mucho lo que vayan a hacer" de ahora en adelante.
Rivera echa de menos que Sánchez no le haya llamado
El jefe del Ejecutivo y el líder del PP han tenido ocasión de intercambiar impresiones en un pequeño aparte que han hecho durante la recepción. Precisamente, si algo ha echado de menos el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha sido que Sánchez no haya intentado estos días crear un frente constitucionalista antes de conocerse en contenido de la sentencia.
En todo caso, su intención es contribuir, como Casado, a la unidad en la respuesta que se tenga que dar ante la llamada a la desobediencia que ha hecho Torra, poniendo el énfasis en que lo importante de la sentencia "es la unanimidad", sin votos particulares, aunque para ello hayan tenido que desestimar el delito de rebelión.
Vox cree que ha habido delito contra el orden constitucional
Y es ese, precisamente, el punto que no comparte Vox, cuyo máximo dirigente, Santiago Abascal, también presente en la recepción posterior al desfile del 12-O, no entiende que las penas queden reducidas "a un delito contra el orden público y no contra el orden constitucional", lo que hubiera exigido una condena por rebelión o, al menos, por conspiración para la rebelión.
Con la ausencia de Unidas Podemos, el ejercicio más practicado esta mañana en el Palacio Real ha sido el de especular en torno al origen de la información sobre la sentencia, adelantada por El Español. La mayoría de los dirigentes políticos, salvo, claro está, los gubernamentales, se han inclinado por apuntar al Ejecutivo como fuente principal, algunos, dicen, para atemperar al mundo independentista al no aparecer la rebelión y, otros, para ir escalonando la respuesta del independentismo.
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