Miles de manifestantes convocados por los CDR protestan este lunes contra el Rey Felipe VI frente al Palacio de Congresos de Cataluña en Barcelona, donde se entregarán los premios de la Fundación Princesa de Girona (FPdGi) presididos por la Familia Real.
Los radicales han intentado boicotear el acto acosando a personas que trataban de asistir al evento, que han recibido escupitajos, empujones e insultos, tal y como ha denunciado el líder del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Josep Bou.
Conforme se acercaba la hora de inicio del acto la tensión ha ido aumentando y el bloqueo se ha ido intensificando. Algunos invitados al acto de los Premios Princesa de Girona han terminado abandonando incluso la zona ante la imposibilidad de acceder al recinto. Varios han sido agredidos.
Por su parte, los radicales se han revuelto en un momento de la tarde tras asegurar haber recibido huevazos desde el interior del Real Club de Polo de Barcelona, ubicado en pleno epicentro de la protesta.
Los radicales han acosado y expulsado incluso a los periodistas que tratan de realizar la cobertura informativa en el lugar de los hechos, y han intentado cortar las vías del tranvía para entorpecer la llegada de los invitados. Pese a todo, la Familia Real ha llegado con normalidad al Palacio de Congresos, acompañados del presidente del Senado, Manuel Cruz, la vicepresidenta Carmen Calvo, la delegada del Gobierno central en Cataluña, Teresa Cunillera, el presidente de la FPdGi, Francisco Belil, y la directora general, Mònica Margarit.
Desde primera hora de la tarde, los antidisturbios de la Brigada Móvil (Brimo) de los Mossos d'Esquadra han realizado un cordón policial que corta la avenida Diagonal, donde decenas de personas tratan de acceder por la fuerza al Palacio de Congresos.
Los agentes han situado furgones en los diversos carriles de la avenida, a la altura de Zona Universitaria, donde se encuentra el emplazamiento escogido para celebrar el X aniversario de la FPdGi y la entrega de galardones.
El Servei Català de Trànsit (SCT) ha informado que hacen desvíos en Esplugues de Llobregat (Barcelona) hacia la Ronda de Dalt, lo que genera ya unos cuatro kilómetros de cola, según han explicado en un tuit.
Los Mossos d'Esquadra también han desplegado vallas antivuelco, una nueva herramienta antidisturbios que la policía catalana aún no había usado y que alquila a una empresa con una antelación mínima de aproximadamente un día.
Con motivo de la entrega en Barcelona, Arran y otros colectivos radicales habían convocado una protesta en la que pedían "bloquear" los accesos del edificio, bajo el lema 'Ni Rey ni miedo'.
También la organización juvenil vinculada a la CUP ha interpelado a los miembros de otras organizaciones independentistas como los CDR, el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans (SEPC), Pícnic per la República y Tsunami Democràtic para sumarse a la protesta, a la que ya han confirmado que irán representantes de JxCat y ERC.
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