El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha ratificado este martes el desacuerdo con el PP y Ciudadanos para repartirse cuatro puestos de la Mesa del Congreso al recalcar que "de manera natural" le corresponden dos y no uno como le han ofrecido los populares. Asimismo, en una entrevista para RNE antes de la sesión constitutiva, el líder de Vox ha afirmado que su partido estudiará "todas las vías legales" si finalmente son excluidos del órgano rector.
"Si el PP colabora con el cordón sanitario contra Vox, está en su derecho y tendrá que explicarlo a sus electores", ha escrito en un hilo en las redes sociales Abascal, que ya se encuentra en su despacho del Congreso para asistir a la Constitución de las Cortes.
Ha recalcado que los populares no pueden "amenazar con un cordón invisible para que Vox regale su puesto a un partido que tiene 10 escaños", en alusión a la propuesta del líder del PP, Pablo Casado, de que el PP se quede con dos cargos de la Mesa, uno Vox y otro Ciudadanos.
"Pueden cederlo ellos. Suena, otra vez, a chantaje", incide el líder de Vox, que destaca que Vox es la tercera fuerza parlamentaria con 52 escaños.
Por lo que reivindica que "de manera natural" les corresponden dos puestos en la mesa e insiste en que "si el PP quiere que un partido con 10 escaños tenga 1 puesto en la mesa, que lo ceda, pero sin obligar a Vox a ceder uno de sus puestos para contentar a Cs, que es socio del PP, no de Vox".
Añade que el PP será quien decida si quiere "una mesa equilibrada hacia la izquierda participando en ese cordón sanitario contra VOX o si, por el contrario, contribuye a que en la mesa haya dos puestos de VOX, que combatan el relato separatista y comunista".
"Unos orquestan un apartheid y un cordón sanitario contra Vox desde la izquierda y el separatismo. Y otros se aprovechan de ese apartheid para obtener ventaja y chantajear a Vox", concluye Abascal, que dice que ha sido educado para "no aceptar ni trágalas ni chantajes".
En el mismo sentido, el portavoz de su grupo, Iván Espinosa, ha asegurado en Twitter que este lunes por la mañana el PP les transmitió que para configurar la Mesa no habría problema.
"Parece que por la noche alguien de su partido estaba cambiando de criterio para intentar crear un 'cordón invisible'", afirma Espinosa, que añade que aunque "no quisieron reunirse con nosotros", confían en la "responsabilidad" del PP.
Si no hay novedad de última hora, los diputados de Vox se votarán a sí mismos para los cargos de la Mesa y fuentes parlamentarias apuntan a que podrían proponer a Macarena Olona como vicepresidenta y a Ignacio Gil Lázaro como secretario, aunque este extremo no ha sido confirmado por la dirección del partido.
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