La abogada de la izquierda abertzale, Arantza Zulueta, condenada por pertenencia a organización terrorista y por liderear el llamado 'frente de cárceles de ETA' fue recibida ayer con un 'ongi etorri' en Bilbao tras su salida de prisión. Zulueta abandonó a primera hora de ayer la prisión de Picassent en Valencia tras cumplir los cuatro meses y medio que le restaban de la condena de ttres años y medio impuesta por la Audiencia Nacional en la última 'macrocausa' contra ETA. La abogada había cumplido casi tres años en prisión provisional, la mayor parte de ellos en régimen de aislamiento.

Zulueta fue recibida en la capital vizcaína por cientos de personas. En el acto difundido a traves de las redes, a la abogada abertzale, que ha defendido a numerosos presos de la banda, se le honró con el 'kaixarranka', un baile tradicional de la localidad vizcaína de Lekeitio. Se trata de una danza llevada a cabo por los pescadores de este municipio en honor a San Pedro para solicitarle su amparo. En ella un 'dantzari' ataviado con la bandera de la cofradía y un sombrero -ayer sustituido por la bandera en favor del acercamiento a los presos de ETA-, baila sobre la caja de libros de contabilidad de la cofradía que portan a hombros ocho hombres. Zulueta reside habitualmente en Lekeitio, localidad a la que está muy vinculada.

También Jon Enparantza, el otro de los condenados que ingresó en prisión, fue recibido con un 'Ongi etorri' en el barrio del Antiguo en San Sebastián. En el acto, en el que participó cerca de un centenar de personas, se bailó un aurresku a Enparantza y se le cantaron versos alusivos a su ausencia y a la dispersión de los presos de ETA.

Junto a Jon Enparantza, la abogada fue la única que cumplió pena de cárcel tras el acuerdo de conformidad al que llegaron el resto de condenados, un total de 45, con la Fiscalía y la acusación ejercida por la AVT y la Asociación Dignidad y Justicia. El acuerdo, por el que los acusados aceptaban reconcer su pertenencia a organización terrorista supuso una rebaja sustancial de las peticiones de pena y la no entrada en prisión de todos ellos.

En los últimos meses la izquierda abertzale ha procurado no publicitar los actos de bienvenida que lleva a cabo a los presos de ETA que salen en libertad. El anuncio de mayor vigilancia para evitar su celebración por parte de la Administración y la denuncia por posibles delitos de enaltecimiento del terrorismo y humillacion a las víctimas ha provocado que estos se celebren con mayor discreción y menor publicidad.

El observatorio de Radicaliación de Covite contabilizó a lo largo del año pasado un total de 108 actos de apología de ETA en Euskadi y Navarra. Entre ellos incluye 63 pintadas, una veintena de 'ongi etorris', tres jornadas "de lucha" en favor de presos de la banda y actos en fiestas populares en apoyo del colectivo de militantes de la organización terrorista.