Lejos de dar por completado el paquete de medidas de protección social a trabajadores y familias con motivo de la pandemia del coronavirus, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, hará de la renta social básica uno de sus principales caballos de batalla, con la intención, además, de que sobreviva al actual estado de alarma, esto es, que venga para quedarse.

El debate está abierto, no sólo en el Ejecutivo, que de momento lo intenta aplazar, sino en la sociedad. “Todos nos hemos vuelto keynesianos”, dice con satisfacción un colaborador de Iglesias respecto a los adeptos que va sumando lo que ha sido una reivindicación tradicional de Podemos. Cita en este sentido al ex ministro de economía popular Luis de Guindos, quien, aún con matices respecto a su alcance temporal, ha apostado por esa renta para paliar los efectos sociales y económicos de la crisis sanitaria. También el que fuera responsable de Economía de Ciudadanos, Toni Roldán, se ha manifestado en este sentido, subrayan las fuentes consultadas.

En definitiva “ya no es algo que sólo defiendan Pablo Iglesias y Nacho Álvarez”, en alusión al secretario de Estado de Derechos Sociales y economista. En Unidas Podemos están convencidos de que el debate “se abrirá camino de manera natural”, entre otras cosas, porque también está en Europa, “que ha hecho saltar por los aires el Pacto de Estabilidad y Crecimiento” y dado autonomía a los Estados para implementar las medidas económicas que consideren necesarias, todo ello avalado por la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen.

El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, se ha convertido en el principal aliado de Unidas Podemos

Pero incluso en el Gobierno, a los ministros de Unidas Podemos le han salido aliados inesperados como el titular de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, aunque no es el único, puesto que el de Transportes, José Luis Ábalos, es receptivo a otras propuestas de la vicepresidencia social como la moratoria en los alquileres en caso de problemas de impago. Del otro lado están la vicepresidenta de Economía, Nadia Calviño, y la ministra portavoz y responsable de Hacienda, María Jesús Montero, en una división que cada vez se hace más evidente.

La colaboración entre la titular de Empleo, Yolanda Díaz y el ex presidente de la Airef -presentado como un ortodoxo muy, muy, alejado en principio de las posiciones de Podemos y del comunismo de Izquierda Unida- es casi simbiótica, según fuentes moradas. El ministro sin carné destinado a hurtarle a Díaz competencias propias del Ministerio de Trabajo, ha resultado ser uno de los principales colaboradores de los socios de coalición, marcando muchas más distancias con el grueso de los ministros socialistas.

"Los viejos dogmas han caido", dicen en el entorno de Iglesias

Una vez que “los viejos dogmas han caído”, dicen, y contra lo que fue la reacción para afrontar la crisis de 2008, en la que se optó por la austeridad, ahora se responde con políticas expansionistas, lo que consideran terreno abonado para defender esa renta social básica.

Eso sí, a diferencia de De Guindos que la limita a la crisis del coronavirus, Unidas Podemos quiere extender en un arco temporal mucho más amplio y ambicioso. "Tiempo de crisis, ¿cuál es el tiempo de crisis?, ¿lo que tardemos en tener de nuevo 52 millones de turistas en Madrid, Cataluña, Baleares, País Vasco o Canarias?", se preguntan en la vicepresidencia segunda, convencidos de que el debate político abierto acabará decantándose a favor de Iglesias.

El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) y exministro de Economía, Luis de Guindos, defendió una "renta mínima de emergencia" tras defender que el Estado "tiene que actuar en este período transitorio para, que después de la crisis sanitaria, con un impacto económico intenso y profundo, no se produzca una crisis social", dijo en una entrevista en La Sexta recogida por Europa Press. En definitiva, que "todos nos hagamos cargo de las necesidades básicas de la población más vulnerable".

Asimismo Unidas Podemos no abandona la batalla por la moratoria de los alquileres, que sí tendría una carácter más coyuntural que la renta social básica. El Consejo de Ministros de este martes, sin embargo, no parece que abordara este asunto sino que se centró en una serie de medidas de impacto para hacer frente al pico del coronavirus, de ahí el anuncio del titular de Sanidad, Salvador Illa, respecto a la implementación de recursos sanitarios a Madrid desde otros lugares de España "donde actualmente no se necesitan", tras pedir "solidaridad" con el territorio más castigado del país.