Efectivos de la Unidad Militar de Emergencia (UME) han llegado a primera hora de esta mañana a la prision de Basauri, en Vizcaya, para proceder a su desinfección. La actuación se enmarca dentro del plan de actuación planificado por Instituciones Penitenciarias y que en colaboración con el Ejército procede a la limpieza de la red de cárceles y centros. Hasta el momento son ya 61 las prisiones y centros de inserción social dependientes de Instituciones Penitenciarias que han sido desinfectados.

Hasta el momennto la epidemia ha provocado dos muertes entre los funcionarios de prisiones y los internos. En la prisión Madrid VII falleció un interno a consecuencia del coronavirus y una funcionario en el Centro penitenciario de Alicante.

En el caso de la prision de Basauri la desinfección se ha llevado a cabo sin que por el momento conste ningún positivo por coronavirus ni entre sus 306 internos ni entre los trabajadores. Desde esta mañana varias unidades del Ejército han accedido al complejo carcelario y han procedido a la desinfeccion de las instalaciones. El pasado domingo la actuación se llevó a cabo sobre la prisión de Zaballa, la más grande del País Vasco, con cerca de 700 internos. Esta prision sí registró un positivo por Covid-19 el pasado mes de marzo tras acudir a una revisión médica al Hospital de Txagorritxu, uno de los focos de la epidemia en Euskadi.

236 positivos

Hasta el momento las cárceles españolas han registrado 236 casos positivos de Covid-19, la inmensa mayoría, 207, entre trabajadores y en menor medida entre los internos, con 29 reclusos infectados. La mayor incidencia se ha producido en los centros penitenciarios de Madrid, con 36 infectados en nueve de sus centros. En el caso de los centros de Andalucía se acumulan ya 24 infecciones entre sus empleados.

En el caso de los internos, hasta ahora se ha tenido que hospitalizar a cinco presos. En la prisión de Madrid VII hay tres internos ingresados en el hospital, uno de ellos en la UCI. Además, en los módulos penitenciarios se encuentran otros 14 internos aislados al presentar sintomatología leve. Desde el inicio de la epidemia se ha dado el alta médica a una decena de presos.

A todos ellos se suma una población de cerca de 1.200 personas entre trabajadores e nternos que se encuentran en cuarentena u observación médica tras haber tenido contacto con algún posible positivo por coronavirus. Se trata de 810 trabajadores y alrededor de 390 internos.