Tensa antesala para unos acuerdos de reconstrucción nacional. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha logrado sacar adelante la tercera prórroga del estado de alarma en que España se encuentra inmersa desde el pasado del 14 de marzo como consecuencia del impacto del coronavirus, que ya ha dejado casi 22.000 muertos y más de 208.000 positivos en todo el país. La situación de excepcionalidad se extenderá, por el momento, hasta el 9 de mayo, si bien el Gobierno prevé relajar algunas medidas de confinamiento en el marco de una nueva etapa de la desescalada.
El Congreso ha dado su visto bueno a la ampliación, si bien el Ejecutivo lo ha logrado con unos apoyos más mermados que la última vez: esta miércoles y pese a su distancia ideológica, a Vox y la CUP se ha sumado JxCat en los votos en contra, con el argumento de que con la centralización de las medidas sanitarias el Gobierno pretende implantar un "155 encubierto" en Cataluña. El tránsito al 'no' de los separatistas se produce después de las profundas críticas que ha ido vertiendo Quim Torra contra la gestión de Sánchez.
En la bancada del 'sí' han vuelto a ubicarse los 88 diputados del PP, si bien habían dejado en suspenso el sentido de su voto hasta la celebración del mismo pleno después de que Moncloa desestimase debatir las peticiones sanitarias y económicas que Casado había propuesto en el marco de la reunión que mantuvo con el jefe del Ejecutivo el pasado lunes. A ellos han vuelto a sumarse Ciudadanos, Unidas Podemos, PNV y resto de grupos minoritarios. En la abstención, como viene siendo habitual, han vuelto a posicionarse los socios de la investidura de Sánchez: ERC y EH Bildu.
En el Congreso ha vuelto a vivirse una bronca jornada en la antesala de la celebración de la primera reunión -la fecha aún está por confirmar- de los ya apodados como pactos de San Jerónimo, por celebrarse en comisión parlamentaria, y en la que participarán todos los grupos para alumbrar unos acuerdos de reconstrucción social y económica, incluido Vox.
Aunque ha vuelto a brindar su apoyo por "lealtad y responsabilidad", Casado ha entonado una letanía de críticas a la gestión del Ejecutivo al que ha reprochado, entre otras cosas, la falta de interlocución por parte de Sánchez. "Abandone ya el Nodo de los fines de semana", inquiría, al tiempo que le instaba a dialogar con la oposición, cuyo apoyo ha sido "el más generoso de la historia".
Si bien Sánchez ha tratado de mostrar en su contrarréplica un tono algo más conciliador, ha sido la portavoz del PSOE, Adriana Lastra, quien no ha ahorrado en críticas al PP, y ha vuelto a culpar a Isabel Díaz Ayuso de las cifras de muertos en Madrid, la tercera región en número de fallecidos por Covid-19 a nivel mundial. "Ustedes tienen la piel muy fina", evidenciaba Lastra, que ha reprochado que existe un "clima enrarecido de rencor en la derecha". Pedía Lastra a Casado que no se convierta "en el pirómano" de Vox, al que le gusta que "todo arda".
El PP ha recogido el guante de negociación de Sánchez presentando su particular propuesta para la celebración "urgente" de la comisión parlamentaria para la reconstrucción, pero avisa: "El Covid-19 es el iceberg, el Gobierno es el Titanic, y nosotros no seremos la orquesta".
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