La cuarta ciudad de Cataluña vuelve a estar en el centro de la polémica y la batalla política tras la dimisión de Alex Pastor como alcalde de Badalona. Y el PSC vuelve a ser la pieza clave para dirimir si Badalona vuelve a manos del PP con Xavier García Albiol, o a la CUP, con Dolors Sabater. Aunque los socialistas apuntan que su intención, a priori, es dar continuidad al gobierno de coalición con Podem que hasta ahora lideraba Pastor. Una opción que tanto Albiol como Sabater descartan.

Los socialistas se mueven por tanto en la disyuntiva entre entregar la cuarta ciudad catalana al PP -que ganó las elecciones con amplia mayoría- o participar en una alianza de fuerzas progresistas encabezada por Guayem, una alianza heterodoxa de independentistas de izquierdas que lidera la CUP. Para que esta opción salga adelante el PSC tendría que dar sus votos, aunque no entre en el nuevo gobierno municipal. Una disyuntiva que, según populares y socialistas, decidirán los responsables del partido en la ciudad.

Con seis regidores Pastor se convirtió en alcalde de Badalona el pasado junio pese a que el PP le sacaba casi el doble de representantes, once ediles. El socialista planteó un pulso a la líder de Guanyem, la independentista Sabater, que se había presentado en coalición con ERC consiguiendo así siete regidores. El pulso se resolvió la misma mañana del pleno, con la retirada de la candidatura de Sabater, que dio la victoria a Pastor y dejó a Albiol sin su ansiado regreso a la alcaldía.

Para llegar hasta ahí, Pastor había roto un año antes el pacto de legislatura con Guanyem que convirtió a Sabater en alcaldesa gracias a la primera alianza de todos contra Albiol -el popular ha ganado de calle las tres ultimas convocatorias electorales en la ciudad- para echar a la independentista y acceder a la alcaldía con los apoyos del PP. Tenía ocho meses para recuperar la marca del PSC en la ciudad, con la promesa de que no reeditaría un pacto de todos contra Albiol tras las elecciones. Pero sí lo hizo.

Suspenso de los electores

Los socialistas y sus socios de Podem aseguran que quieren seguir adelante con el actual gobierno local de coalición y que el proyecto "sigue siendo vigente". Pero los resultados del último barómetro municipal no los avalan. El gobierno municipal suspendía en enero cn una nota de 4,5, un suspenso al que nunca se enfrentaron sus antecesores. Además, el 53% de los vecinos creía que la ciudad ha empeorado en los dos años anteriores, frente al 34,8% en 2018 y el 31% el año anterior. Y la expectativa no era mejor para los próximos años, en los que sólo el 20% tenia expectativas de mejora.

Con estos precedentes, García Albiol lo tiene claro: "La alcaldía está entre Sabater o yo". Es decir, la reedición del pacto "todos contra el PP" o la posibilidad de que el PSC se abstenga o no vote a la ex alcaldesa -con la que rompió por empeño en convertir a Badalona en abanderada del independentismo, siendo la ciudad de Cataluña con mejores resultados del PP-. "El PSC tiene que analizar si lo que ha hecho desde 2015 le ha favorecido" apunta el popular, advirtiendo de que los resultados de 2018 fueron fruto en gran parte del viento a favor que supuso para los socialistas la victoria de la moción de censura de Pedro Sánchez.

Albiol, que como todos los lideres municipales ha realizado ya una primera ronda de contactos, sabe que difícilmente contará con apoyos más allá de su partido. Pero defiende un acuerdo "lo más amplio posible, no necesariamente de gobierno, sino de gestión" para definir las prioridades de la ciudad ante la crisis económica y social que augura la crisis del coronavirus.

El PSC, descabezado

Desde el PSC defienden que "tenemos legitimidad para liderar" una amplia coalición de gobierno porque "somos el primer partido progresista", dado que Sabater perdió desde la investidura el apoyo de los tres regidores de ERC, desglosados ahora en un grupo propio. Apuntan además en el PSC que en este primer medio año de mandato la sintonía ha sido mucho mayor con las fuerzas independentistas, puesto que todas las iniciativas aprobadas en el pleno han salido adelante con los votos de Guanyem, ERC y JxCat, además del PSC y Podem.

Pero Dolors Sabater ha asegurado en estas primeras horas que esta vez no se dejará vencer por un pulso de los socialistas. "Si el PSC no me apoya, hará alcalde a Albiol" aseguró ayer contundente la ex alcaldesa. La falta de un liderazgo claro tras la caída de Pastor -aunque el nombre más probable para sustituirlo es el de Ruben Guijarro, debilita aún más la posición del PSC. Y queda por ver si, esta vez, la dirección de Miquel Iceta está dispuesta a volver a asumir el riesgo de gobernar la cuarta ciudad de Cataluña con la CUP, como sucedió en 2015.