"El estado de alarma prorrogado más allá de esta semana no tiene ningún sentido. Con la información que hoy tenemos no podemos apoyarlo". El presidente del PP, Pablo Casado, ha anunciado este lunes que su formación no amparará el miércoles la prórroga de la situación de excepcionalidad durante los próximos 15 días, si bien no ha querido desvelar el sentido de su voto -en contra o abstención- y ha querido transmitir que, con todo, no es su postura definitiva.

"Una vez que Sánchez dice que podemos salir a tomar un vermú, consideramos que se debe adaptar la normativa legal a la situación", con la utilización de otros mecanismos legales, como la Ley Orgánica de Medidas Especiales en Materia de Salud Pública de 1986, la Ley General de Salud Pública o la ley de Seguridad Nacional, para garantizar la desescalada y contener la movilidad de la población en las próximas semanas.

"Esa es mi posición. El estado de alarma no puede ir más allá de 60 días", afirmaba Casado en Onda Cero, quien añadía que la situación de excepcionalidad "tenía sentido cuando las UCI iban a colapsar", pero no para otro tipo de fines, como instalar a Pablo Iglesias en el CNI, tramitar "leyes orgánicas por órdenes ministeriales" o "limitar discrecionalmente la libertad de los españoles" que, ha insistido, "ya no tiene sentido" desde el punto de vista sanitario. "Es una degradación del sistema democrático, y no se puede permitir", zanjaba.

El miércoles, el Congreso de los Diputados debatirá una nueva prórroga del estado de alarma, que en esta ocasión se estima complicada para Pedro Sánchez. El Gobierno de coalición comienza a adolecer de aliados: ERC ha manifestado su rechazo a la prórroga y reclamar que se devuelva las competencias a las comunidades autónomas; y el PNV se desmarca también, aunque aún sin confirmar el sentido de su voto. "Esperemos que pasen cosas de aquí al miércoles, aunque a día de hoy no tenemos el texto de la prórroga", ha señalado este lunes Andoni Ortuzar.

Por ello, el sentido del voto del PP se estima esta vez vital para que Sánchez logre sacar una nueva prórroga del estado de alarma y continuar con las fases para la desescalada según lo previsto. Por el momento y a tenor de las declaraciones de Casado, los populares no lo apoyarán aunque "por respeto" esperarán a que "Sánchez nos llame y nos explique cuál es su posicionamiento" y a las resoluciones del Consejo de Ministros que se celebra mañana, si bien sí se ha mostrado dispuesto a pactar con el Ejecutivo un calendario para el desconfinamiento efectivo.

"Chantaje" con los ERTE

Aunque ha negado que pueda haber condiciones que se deban negociar a cambio de su apoyo, el líder de la oposición ha pedido también que el Gobierno desvincule la ampliación de los ERTE y la liquidez de las empresas con la situación del estado de alarma.

Casado ha calificado de "chantaje" que se liguen ambos expedientes, y ha insistido en que el Ejecutivo debe explicar "por qué necesitamos un estado de alarma cuando hay leyes que pemiten limitar la movilidad".

También ha solicitado a Sánchez que informe sobre si España tiene previsto pedir un rescate al Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), aunque no ha querido desvelar cuál es su posición respecto a esta salida porque es sólo el Gobierno quien maneja "todos los datos para poder tomar esas decisiones" y el que conoce cuál es la situación del Tesoro Público español.

Ayuso, también en contra

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, también se ha manifestado abiertamente en contra de prorrogar el estado de alarma. En una entrevista en Telecinco y siguiendo la vía marcada por Pablo Casado, la dirigente regional ha asegurado que la situación de excepcionalidad "hasta aquí ha funcionado, pero estamos en otro escenario".

Aunque ha vinculado la decisión final a Génova, Ayuso se ha reafirmado en la tesis de que "hay regulación suficiente para ir conteniendo la evolución de la pandemia" más allá del estado de alarma, aunque ha pedido cautela porque "esto no ha terminado y no nos podemos permitir una vuelta atrás".