Elkarrekin Podemos ha reprochado al Partido Socialista de Euskadi no haber mostrado interés ni haber respondido a la petición que le trasladó este martes para sentarse junto a EH Bildu en una mesa a tres para explorar la conformacion de un Gobierno de izquierdas. En una nota, la formación morada recuerda que en las elecciones de este pasado domingo la sociedad vasca "mostró mayoritariamente" su apoyo a formaciones de izquierda y que ante ello habría que haber actuado con "responsabilidad democrática".
Desde el inicio de la campaña electoral Elkarrekin Podemos ha defendido que en Euskadi socialistas e izquierda abertzale se unan a ellos para constituir una alternativa a un Gobierno liderado por el PNV. Señala ahora que el pasado día 14 se puso en contacto con ambas formaciones para la "consecución del objetivo" de un Ejecutivo de izquierdas. Apunta que de la izquierda abertzale recibió "inmediata" respuesta pero que dos días más tarde continúa sin noticias del PSE.
Insiste en que su disposición al diálogo para abordar esta posibilidad siempre es plena pero que "obviamente es imposible" si no se implican los tres partidos. La suma del PSE, EH Bildu y Elkarrekin Podemos permitiría a día de hoy alcanzar la mayoría absoluta, al sumar 38 de los 75 escaños del Parlamento Vasco. Una mayoría que podría perderse mañana si la Junta Electoral Central altera el reparto final de escaños tras el recuerto del voto CERA y resolver las reclamaciones del escrutinio. En Vizcaya el PP disputa un escaño a EH Bildu por poco más de un centenar de votos.
Reunión PSE-PNV
El PSE nunca ha apostado por una alianza con Elkarrekin Podemos y EH Bildu. La alternativa de izquierdas que ha reclamado la candidata de Podemos, Miren Gorrotxategi, se dio por descartada casi desde el primer momento. En el PSE la opción prioritaria es reeditar el acuerdo de coalición que hoy mantiene con el PNV en el Ejecutivo vasco.
Muestra de ello es que el próximo lunes nacionalistas y socialistas celebrarán ya el primer encuentro en la sede del PNV para afrontar la constitución del nuevo Gobierno tras los resultados del 12-J. La diligencia con la que Urkullu quiere completar los trámites ha llevado a su partido a no plantear por ahora la tradicional ronda de partidos para explorar apoyos sino ir directamente al encuentro de su actual socio de Gobierno para buscar la reedición del pacto.
Podemos no logró que la fórmula del Gobierno de izquierdas, que el propio Pablo Iglesias defendió en campaña, sumará grandes adhesiones. Tampoco la izquierda abertzale se incorporó a la apuesta que tampoco parece haber secundado buena parte de su electorado. Elkarrekin Podemos perdió cinco de sus once escaños en la Cámara de Vitoria y más de la mitad de los votos respecto a las autonómicas de 2016, al pasar de los 157.000 votos a algo más de 71.000.
jj
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