Felipe VI ha hecho este jueves su primera aparición pública desde que la Casa Real anunciara el pasado lunes la salida de España de Juan Carlos I como medida para contrarrestar la polvareda levantada por sus presuntos negocios ocultos en el exterior. El rey ha recibido en audiencia en el Palacio de la Zarzuela al ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Francisco Bustillo, durante su visita a Madrid.

La reaparición del monarca ha tenido lugar tres días después de que se comunicara la decisión de Juan Carlos I de trasladarse fuera de España "en estos momentos", materializada a través de una carta enviada a su hijo. Desde entonces, ni la Zarzuela, ni el propio rey emérito, que sigue perteneciendo a la Familia Real, han informado de su paradero en medio de las especulaciones de dónde se encuentra.

Algunos medios han publicado que está en la República Dominicana en un complejo hotelero de lujo en la localidad de La Romana, en la costa del Caribe, mientras que otros se inclinan por situarlo en Portugal. La última pista que hubo de don Juan Carlos fue que estuvo el pasado fin de semana en Sanxenxo (Pontevedra) con sus amigos del ámbito de la vela y se alojó en casa de Pedro Campos, una de las personas de más confianza de su entorno.

La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha asegurado en una entrevista con EFE publicada este jueves que "no ha habido consenso, ni negociación" entre el Gobierno y la Zarzuela en relación con la salida de España del rey emérito. Montero ha añadido que Felipe VI tomó "sus propias decisiones" y se las transmitió al presidente, Pedro Sánchez, en los despachos privados habituales.

El recibimiento al ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay ha tenido lugar sin presencia de medios de comunicación y la Zarzuela ha sido la encargada de distribuir las imágenes y fotografías, como ha ocurrido desde que el jefe del Estado reanudó su actividad ordinaria tras levantarse el estado de alarma el 22 de junio.

En los actos celebrados desde entonces, la Casa Real no ha permitido la entrada de periodistas al palacio y la cobertura se ha hecho con sus medios oficiales. La audiencia con Bustillo ha tenido lugar en el despacho de Felipe VI, aunque ambos, protegidos con mascarilla, se han saludado en el Salón de Audiencias de manera cordial.

El canciller ha bromeado con saludarle con el codo o con el puño, al no ser aconsejable estrecharse la mano por la pandemia, y finalmente le ha dado una palmada en la espalda como gesto amistoso mientras los dos sonreían.

En la audiencia, también ha participado la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y para Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach. Bustillo llegó a España el pasado lunes en su primer viaje al exterior desde que fue nombrado canciller por el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, tras la renuncia de Ernesto Talvi el pasado 1 de julio.

El que ha sido embajador de Uruguay en España hasta su designación ha mantenido diversas reuniones durante su estancia en Madrid. Entre ellas, con la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, quien el martes le entregó la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica.

El rey asistió a la toma de posesión de Lacalle Pou el pasado 1 de marzo, en la última ocasión en la que ha viajado a Iberoamérica. Tras la audiencia de este jueves, don Felipe va a proseguir su actividad en Palma, adonde va a llegar con la reina Letizia y sus hijas entre mañana, viernes, y el sábado, para pasar unos días de vacaciones, como hace todos los años.