Desde que Melyssa Pinto, Tom Brusse y Sandra Pica coincidieran en la segunda edición de La isla de las tenciones, ese triángulo amoroso y todas las aristas que han ido surgiendo dentro del mismo, se han convertido en uno de los temas más recurrentes de Telecinco.

Esta vez Secret Story: la casa de los secretos, el nuevo programa de telerrealidad de Mediaset que se estrenó el pasado jueves como uno de los reclamos del grupo para este otoño, y en el que participa Sandra Pica, ha sido el centro neurálgico de la polémica.

En una conversación emitida este domingo en el debate que dirige Jordi González, la catalana confesaba a uno de sus compañeros en la casa que nunca volvería con Tom porque tiene “dignidad y orgullo”, añadiendo, además, que prefiere no dar muchos detalles de su relación con el francés durante el concurso: "No puedo con él. Está confundido si piensa que no voy a hablar. El día que quiera contar todo lo que pasó, lo haré en un plató de televisión".

Tom Brusse, que estaba en el plató de televisión como colaborador, no ha dudado en cargar contra su expareja afirmando: "Ella tiene dos papeles: hablar de mí y hablar de Julen. No es divertida, no es graciosa y no tiene nada más que decir". Y a sus palabras, se unían las de Melyssa Pinto, también aludida del vídeo emitido: "Se contradice. Dice que no quiere televisión, pero va, que no va a hablar de Tom, pero habla. Necesita retroalimentar temas del pasado para estar ahí. No me esperaba que hablara de mí porque me dijo que quería una conversación conmigo para aclarar las cosas, y ahora me pone verde. No la capto".