Este sábado se celebró la gran final de la 67ª edición de Eurovisión, que se saldó con el triunfo de Loreen (Suecia) gracias a la canción Tattoo. Tal y como se había adelantado y como tributo al país ganador del certamen de 2022, la final de la edición de este año comenzó con Stefania, la canción de los ucranianos Kalush Orchestra.
El Liverpool Arena acogió después el desfile de banderas, que siguió el orden estipulado para las actuaciones, con Blanca Paloma en octava posición, un lugar especialmente bienaventurado en Eurovisión, que este año tuvo como lema Unidos por la música.
Poco después, en la posición 11, desfiló Marco Mengoni, candidato de Italia. Y su paso por el escenario fue uno de los más comentados de la noche debido a que, además de la bandera de su país como el resto de representantes, llevó una con los colores LGTBI.
Marco Mengoni desfila con una bandera LGTBI
Fue uno de los favoritos del formato, alcanzando la posición número 4 y, al igual que la ganadora, Loreen, repitió en Eurovisión. Aunque esta vez interpretó Due Vite, en 2013 quedó en séptima posición gracias a la canción L'essenziale.
La del artista de 34 años fue toda una declaración de intenciones, pero también se pudo interpretar como un acto político, pues la presidenta del Consejo de Ministros de Italia desde octubre de 2022, Giorgia Meloni, hace continuos alegatos contra el "lobby LGTBI" y la "ideología de género".
Reyes Maroto, la mayor fan de Blanca Paloma
La representante española actuó en octava posición y, pese a que quedó muy por debajo de lo que apuntaban las apuestas internacionales, encandiló a todos con su Eaea, la nana dedicada a su abuela Carmen.
Y los políticos no iban a ser menos a la hora de mostrar su apoyo. Entre ellos destacó Reyes Maroto. La exministra de Industria y candidata a la alcaldía de Madrid por el PSOE publicó un vídeo en sus redes sociales en el que aparecía de lo más implicada en un local mientras disfrutaba de la actuación de nuestra arquera.
La lechera inesperada
Otro de los momentos más sorprendentes de la noche llegó cuando, mientras hablaban las presentadoras de la final de Eurovisión 2023 en uno de los espacios entre actuaciones, apareció una lechera muy apasionada de fondo junto a la delegación de Portugal en lo que a todas luces pareció un homenaje a las representantes de Polonia en 2014, cuando Donatan y Cleo interpretaron My slowianie.
Polonia, ¿un homenajea al SingStar
Blanka representó a Polonia en el Festival de la Canción de Eurovisión 2023 con el tema Solo, en inglés. La suya fue una de las propuestas más coloridas y festivas de la noche, y su puesta en escena llenó las redes de comparaciones en cuestión de minutos por su parecido a la estética del icónico videojuego SingStar o incluso con las pausas publicitarias de Disney Channel.
El 'sandwich' de Loreen
Pese a que era, incluso antes de ser seleccionada en Suecia, era ya una de las favoritas indiscutibles y cosecha todo un ejército de fans gracias a su primera vez en Eurovisión, cuando se llevó la victoria con Euphoria; la propuesta de este año de Loreen fue objeto de polémica por su sospechoso parecido con el tema Flying free de Pont Aeri.
Y si hubo otro aspecto comentado de la actuación fue su puesta en escena: al interpretar Tattoo, la artista quedó a pocos metros de ser aplastada por las dos plataformas que enmarcaron su número. Los más creativos vieron en la propuesta un sandwich o incluso un canapé:
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