caption id="attachment_374667" align="aligncenter" width="800"]Primero en Upday [/caption]

Se espera estos días con expectación en Prado del Rey el inicio de los Juegos Olímpicos de París, a sabiendas de que sus competiciones más relevantes se celebrarán en horario de máxima audiencia, al contrario que sucedió en Tokio 2020 (2021). La corporación invirtió más de 100 millones de euros en la adquisición de los derechos audiovisuales de las dos principales citas deportivas veraniegas con la esperanza de que impulsaran su audiencia. En el caso de la Eurocopa lo ha conseguido. Ahora bien, el problema que se plantea es que esta alegría ni mucho menos es eterna. De hecho, estos resultados son flor de un día.

Porque el análisis de los datos de audiencia de las últimas semanas revela las diferencias entre los días en los que se han emitido partidos y los que no. Tal es así que, entre el 14 de junio y el 17 de julio, La 1 de RTVE obtuvo una audiencia de 18,47 puntos durante los días en los que se emitieron los partidos, frente a los 9,5 que cosechó en las jornadas ‘de barbecho’.

Ésta fue la primera vez en muchos años que la corporación ofreció un torneo futbolístico veraniego (masculino) en abierto y eso ha impulsado su audiencia muy por encima de la media. De hecho, le permitió liderar la lista de las cadenas más vistas en junio, por delante de Antena 3; y ha impulsado su resultado en julio, cuando también terminará en primera posición.

Comparativa interanual

El año pasado, cerró junio con una cuota de pantalla del 9,7% y julio, con el 9,9%. El sexto mes del año de 2024 lo terminó con el 12,7%, mientras que los primeros 17 días del actual los ha finalizado con el 16,5%.

El pasado domingo, después de la emisión de la final entre España e Inglaterra, y de cerrar el día con el 35,2% de la cuota de pantalla, marcó un resultado parcial mensual del 17,6%. Esto ilustra sobre la importancia que tuvo este torneo para la corporación.

Al día siguiente, la emisión en La 1 de los actos de celebración del campeonato, desde Madrid, provocó que la cadena terminara el día en la primera posición de la TDT, con el 14,9% del share. Sin embargo, al día siguiente, cuando todo volvió a la normalidad, la cuota de pantalla se desplomó hasta el 8,6%. Y el día 17 el resultado fue del 9%.

En los días en los que no ha habido fútbol, La 1 tan sólo ha alcanzado el doble dígito de audiencia en 2 ocasiones. En otras palabras: sin el deporte, sus resultados son muy similares a los de los mismos meses del año pasado. Por tanto, la corporación podría padecer, en adelante, un fenómeno que ya se registró tras el Mundial de Catar o los Juegos Olímpicos de Tokio: es el de invertir decenas de millones de euros en deportes, pero no lograr retener la audiencia que atrae durante el curso de las competiciones.

¿Y la nueva temporada?

Algún consejero de RTVE se muestra pesimista, en conversaciones privadas, sobre la posibilidad de que después de los Juegos Olímpicos y, sobre todo, a partir de septiembre, La 1 pueda mantenerse como líder de audiencia e incluso aspirar a ganar, mes a mes, a Telecinco.

La principal apuesta para la próxima temporada será el programa de David Broncano, que se emitirá de lunes a jueves en el access prime time y que competirá contra El Hormiguero. Sin embargo, estos informantes no prevén que provoque un arrastre de audiencia especialmente relevante. Al menos, como para mejorar en exceso la cuota de pantalla de la última temporada.

Sea como sea, los 40 millones de euros que invirtió la corporación en los más de 50 partidos de la Eurocopa mejoraron con creces su cuota de pantalla. La final fue vista por 13,5 millones de espectadores y el 78,7%. Contra Francia, logró 11,5 millones de seguidores (71,7%); contra Alemania, 8,2 millones (67,9%); y contra Georgia, 9 millones (60,3%).

En la primera ronda, registró 6,7 millones en el partido que le enfrentó a Albania (48,1%); un total de 8,5 millones en el choque contra Italia (56,4%) y 5 millones en el duelo inaugural contra Croacia (49,9%).