La entrada en liza de David Broncano y su Revuelta ha removido las aguas del hasta ahora pacífico estanque de la noche televisiva, donde El Hormiguero venía faenando sin competencia desde hace muchas temporadas. El equipo de Pablo Motos intenta reaccionar con nuevos perfiles de invitados que les permitan acceder al segmento demográfico en el que arrasa Broncano. Pero los resultados no acompañan y el nerviosismo casi se palpa a través de la pantalla.

Ayer pudo verse con la visita de Ceciarmy, el influencer enmascarado que ha conseguido millones de seguidores en redes sociales reciclando contenido viral. En noche de Champions, El Hormiguero hizo su peor dato de la temporada, un 12,5 % de share y algo menos de 1,7 millones de espectadores. Mientras, La Revuelta, que tuvo como invitada principal a la soprano húngara Sonya Yoncheva, hizo casi tres puntos más que el programa de Antena 3, un 15,2%, y más de dos millones de espectadores.

Un revulsivo llamado Belén Esteban

Pocas horas después de este mal dato se ha sabido que el próximo miércoles 30 de octubre la invitada especial del programa de Motos será Belén Esteban. La visita, confirmada por portales especializados en televisión como Teleaudiencias y El Televisero, supone el retorno de la Esteban a Antena 3 veinte años después de abandonar Sabor a ti, el programa que entonces dirigía y presentaba Ana Rosa Quintana en la cadena de Atresmedia. Y casi un mes después de que ella y su compañera María Patiño pisaran el escenario de La Revuelta, en un ejercicio metatelevisivo que las llevó en directo del plató de su programa en streaming, Ni que fuéramos shhh, hasta el teatro madrileño donde cada tarde graban Broncano y los suyos.

Con la conocida princesa del pueblo, Motos recurre a un casi infalible comodín del público. Pero no se puede ignorar que se trata de una carta marcada por haber pasado por la competencia hace apenas tres semanas. Está por ver si la noche del 30 Motos consigue imponerse a Broncano, pero lo que parece claro, si se atiende a los datos, es que el hasta hora invencible Hormiguero se enfrenta a un agotamiento de la fórmula que exigirá algo más que invitados de relumbrón. Gane o pierda la pugna diaria, la frescura de la propuesta broncana sigue imponiéndose en la batalla del relato.