Comparten tiempo con los Mad Men de la publicidad norteamericana, pero nada más. Los publicistas españoles de la segunda mitad del siglo XX poco tienen que ver con los competitivos ejecutivos de la Avenida Madison de Nueva York que se han hecho famosos por la serie Mad Men. Una exposición en el Museo Nacional de Artes Decorativas de Madrid recupera su filosofía colaborativa y vanguardista del Grupo 13.
"La publicidad en España se nutría de ilustradores, dibujantes y artistas. Ellos copaban la publicidad en aquellos años", explica Sofía Rodríguez directora del Museo Nacional de Artes Decorativas. "El Grupo 13 es un grupo que comparte inquietudes y, en muchas ocasiones, proyectos. Más allá de lo meramente alimenticio, compartían gustos y una visión sobre la creación", añade.
En 1961 se creó en Madrid un colectivo de jóvenes publicistas e ilustradores unidos bajo el nombre de Grupo 13. Su objetivo era transgredir el lenguaje publicitario y dignificar la publicidad en la España post-autárquica desde la obligada neutralidad política.
La actividad central del Grupo 13 fue la publicidad y, en su trayectoria, se aprecian diversas etapas que son una evolución, en paralelo, a los sucesivos cambios de denominación de una profesión, en aquel momento, casi germinal. "Según van desarrollándose los medios técnicos y se va sofisticando la profesión estos artistas se van convirtiendo en diseñadores y se convierten en profesionales que son capaces de reflejar en un logo una idea desarrollada en un plan de comunicación", añade Rodríguez.
La profesión de publicista se fue sofisticando según el mercado y la economía española crecían en tamaño y complejidad. "Esta exposición refleja cómo era la publicidad antes de esa evolución, en la que el peso de una campaña recaía en estos artistas". La muestra analiza la situación de los publicitarios entre el arte y el diseño y aborda los desafíos éticos y profesionales en los que el grupo se debatió y su aportación como mediadores entre el sector publicitario, el diseño de la comunicación y la creatividad artística.
La importancia del logo
Frente a un primer momento en el que el cartel era la máxima expresión de su trabajo la evolución de la comunicación comercial fue desplazando su interés hacia la imagen de marca. El logo se convirtió en el centro de la comunicación de una marca y sobre él se construía una identidad corporativa. Muchos de aquellos publicistas terminaron trabajando en el diseño de logotipos "igual que lo diseñaban hacían una escultura, inspirada en el mismo concepto que el logo", explica la directora del museo.
Del trabajo de estos publicistas nacieron algunos logos emblemáticos de la segunda mitad del siglo XX como el de Correos, Dhul, el de la Organización Nacional de Ciegos o el del PSOE.
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