La filtración de las preguntas del examen de oposición para la categoría de 'informador', acaecida el pasado domingo, ha incrementado la desconfianza entre las diferentes fuerzas sindicales de Radiotelevisión Española, habitualmente enfrentadas, pero estos días ubicadas en el centro de un incendio que ha sobrepasado los muros de Prado del Rey y ha provocado un humo negro que se ha apreciado a varios kilómetros a la redonda.

Representantes de los cinco principales sindicatos de la corporación se han reunido este miércoles para intentar negociar con la empresa las normas que regirán el examen del próximo 2 de noviembre, con el objetivo de evitar que las corruptelas vuelvan a obligar a suspender la prueba.

Durante la reunión, un portavoz de CGT ha propuesto al resto de los asistentes la firma de un documento -al que ha tenido acceso este periódico- con el que pretendía que todos los sindicatos se comprometieran a sufragar los costes derivados de la suspensión del examen del pasado domingo en caso de que se demostrara que la filtración procedía de alguno de los miembros que designaron para el titular.

La polémica se ha producido cuando los representantes de UGT -Jesús Trancho y Miguel Ángel Curieses- y el del Sindicato Independiente -José Miguel Millán- se han negado a poner su nombre en el borrador, al considerar que la iniciativa era improcedente por surgir desde CGT.

A través del citado documento -reza el texto- "los sindicatos firmantes" aseguran que "los miembros del Comité de Valoración" propuestos por cada uno de ellos "no han sido los responsables de la filtración de las preguntas".

En caso de que se demostrara que así fue -continúa-, "las secciones sindicales abajo firmantes" se hacen "corresponsables económicamente de las consecuencias derivadas de esta filtración". Entiéndase, en este sentido, de los gastos que podrán reclamar los opositores, relacionados con desplazamientos y estancia en Madrid.

Un alto directivo de la empresa inciden en que la filtración se detectó la noche anterior y que fue una de las cinco miembros del tribunal designada por RTVE la que dio la voz de alarma. Esta versión la recoge este miércoles El Mundo en una información, si bien otro miembro del Comité de Dirección de la corporación expresa en que no puede descartarse la posibilidad de que hubiera más filtradores.

Porque el primer documento que se detectó -al parecer, manuscrito y de dos páginas-, y que habría circulado en un grupo de WhatsApp con múltiples opositores, podría no haber sido el único existente en este sentido. De ahí que RTVE extreme la precaución a la hora de pronunciarse.

Batalla sindical

La negativa de UGT y SI a adherirse al documento rubricado por el resto de las fuerzas sindicales ha generado suspicacias entre sus compañeros de reunión, si bien nadie ha aireado ninguna prueba fehaciente contra ellos. Es más, desde el Comité Intercentros, tres personas inciden en que desconocen a quién ha designado la empresa para realizar la auditoría interna.

Los sindicatos volverán a reunirse en los próximos días para aprobar una modificación sustancial del reglamento que precederá la convocatoria del examen. Entre otras cosas, aceptarán que las preguntas del examen se decidan con menos de 24 horas de antelación sobre la fecha prevista para su celebración; y negociarán el hecho de que se creen dos pruebas distintas para que, en caso de que se filtre una, no haya que suspender y aplazar de nuevo la convocatoria.

Una vez se alcance ese pacto, empresa y sindicatos nombrarán a los vocales del nuevo 'jurado'.