Hace ya casi veinte años del estallido de la 'gran recesión'. Entonces, se cerró el grifo de los mercados financieros y se evidenció que la estrategia fijada por Juan Luis Cebrián para Prisa durante los años anteriores había sido demasiado arriesgada. Casi suicida. Su deuda llegó a situarse en el entorno de los 6.000 millones de euros y eso hipotecó su futuro. Tal es así que ese problema todavía causa quebraderos de cabeza actualmente en los directivos del grupo.

Sus compromisos con la banca acreedora ascendían a finales de septiembre a 824,9 millones de euros, es decir, a algo más de 4 veces su resultado operativo EBITDA, lo que obliga a sus gestores a extremar las precauciones para garantizar la solvencia del grupo a medio y largo plazo. Tal es así que Prisa espera cerrar una nueva refinanciación de su deuda durante los próximos meses, según apuntan fuentes internas.

Amber Capital

Son muchos los rumores que han surgido en los últimos tiempos sobre los enfrentamientos existentes entre algunos de sus accionistas y su presidente, Joseph Oughourlian. Lo cierto es que el dueño de Amber Capital es el principal accionista de la compañía, con casi el 30% de las participaciones, y está rodeado de un Consejo de Administración en el que las voces críticas ni mucho menos suenan tan alto como en anteriores etapas.

Estos informantes no ocultan las dudas existentes entre una parte de la Dirección del grupo sobre el proyecto de canal de TDT que se cocina desde hace varios meses dentro de Prisa, a la espera de que el Gobierno convoque el proceso para repartir una nueva licencia de televisión. Su consejero editorial, José Miguel Contreras, ha sido el principal defensor de este plan -apuntan estos informantes-, que se podría impulsar con una parte de los fondos que obtuvo el grupo de su última operación de emisión de bonos convertibles en acciones, a principios de 2024.

Sin embargo, esas discrepancias no han generado una crisis de liderazgo. De hecho, Oughourlian capitanea estos días los dos principales objetivos que se ha marcado Prisa para 2025. Por un lado, el de acordar con Pimco una refinanciación de sus adeudos; y, por otro, el de culminar y presentar el plan estratégico que seguirá la compañía durante los próximos años.

¿Cuánto dinero debe Prisa?

La empresa fundada por Jesús de Polanco posee una deuda bancaria que se estructura en obligaciones a largo plazo de 799,3 millones de euros y de otras, a corto plazo, que alcanzan los 25,7 millones. En su última refinanciación, cerrada en abril de 2022, consiguió la cancelación del tramo 'junior' de su deuda y un ahorro de intereses que se estimó en alrededor de 50 millones de euros.

En este nuevo proceso, el grupo espera suavizar las condiciones de pago y abaratar el coste de deuda en la medida de lo posible.

Sea como sea, es la 'enésima' maniobra financiera que ha planteado el grupo para intentar obtener algo de oxígeno. Durante los dos últimos ejercicios, planteó sendas operaciones de emisión de bonos que obligaron a invertir a sus accionistas más de 250 millones de euros para obtener liquidez.

En el pasado, la compañía se ha visto obligada a lanzar ampliaciones de capital para dar entrada a nuevos socios -desde Liberty hasta Grupo Herradura Occidente o International Media Group- y a desprenderse de algunos activos estratégicos, como los de Digital Plus, Ediciones Generales, Mediaset o Santillana España.

Resultados de septiembre

El grupo registró durante los primeros nueve meses del año unos ingresos de 607 millones de euros (-2,4%), un resultado operativo de 85 millones (-5,9%) y unas pérdidas de 37,3 millones de euros.

Todo ello, en un 2024 de dificultades generales para los grupos de medios de comunicación y pese al buen rumbo del negocio digital de Prisa Media y Santillana, cuyos resultados han mejorado en los últimos años.