La Guardia Civil ha encontrado este miércoles en las inmediaciones de la casa de Godella, en la que residían y se encontraron muertos a dos niños el pasado jueves, un objeto contundente que podría ser el que se utilizó para golpear en la cabeza a ambos.
Según han confirmado a EFE fuentes de la investigación, el hallazgo de este objeto se ha producido en un pozo, que ha sido inspeccionado por agentes del grupo especializado en actividades subacuáticas (GEAS) en presencia de la policía judicial.
El crimen se cometió, supuestamente, horas antes del hallazgo de ambos cuerpos, que fueron enterrados de forma separada en las inmediaciones de la vivienda, y en ambos casos presentaban golpes en la cabeza.
Los padres de ambos menores se encuentran en prisión provisional acusados de asesinato y la madre ha sido trasladada hoy a una celda individual tras sufrir una crisis nerviosa.
Brote psicótico en prisión
María Gombau, quien presuntamente asesinó a sus dos hijos el pasado jueves en Godella (Valencia), ha sufrido una crisis nerviosa en la prisión valenciana de Picassent lo que ha obligado al centro a recluirla en una celda individual con un cristal desde donde es vigilada por otras dos reclusas de apoyo.
Fuentes penitenciarias han indicado que el incidente se produjo ayer en torno a las 14:00 horas cuando la interna, después de comer, se dirigía a la celda del módulo de enfermería junto con otras dos reclusas que el centro ha designado como presas de apoyo.
En ese momento, según el relato de las fuentes consultadas, la reclusa comenzó a decir que tenía miedo de hacer daño a las dos internas y salió corriendo hacia el patio en actitud nerviosa y agresiva.
Finalmente, unas funcionarias consiguieron reducir a la interna, que fue conducida a una celda individual que cuenta con una de sus paredes acristaladas y que está contigua a otra celda donde permanecen las otras dos presas de apoyo.
En declaraciones a Efe, el presidente autonómico del área de prisiones del CSIF y responsable de este sindicato en Picassent, Jorge Vilas, ha explicado que la interna comenzó a decir que quería ver a los niños, mientras las otras dos reclusas que le acompañan le contestaron que no podía ser, pero ella se negaba a ir a la celda.
Vilas ha detallado que en ese momento acudieron los funcionarios, que trataron de convencerla de que debía ir a su celda, si bien ella huyó corriendo al patio y, una vez allí, mostró una actitud agresiva con intentos de patadas y mordiscos hacia los funcionarios, quienes finalmente consiguieron reconducir la situación y la llevaron a una celda de observación.
La interna comenzó a decir que quería ver a los niños y mostró una actitud agresiva con los funcionarios
Los funcionarios avisaron al médico, según Vilas, que ha indicado que hasta ese momento ni ella ni el padre de los niños, que también está interno en la misma cárcel, habían presentado un comportamiento fuera de lo normal ni han nombrado a los niños. En el caso del padre, se muestra preocupado por el desarrollo de la vida en el módulo penitenciario.
La madre recibe la medicación que se le ha pautado fuera del hospital, si bien advierte de que el problema en este caso son los brotes que pueda sufrir.
Fuentes de la investigación señalaron el sábado que la mujer sufre desequilibrio mental y tenía alucinaciones, y el día del fallecimiento de los niños tuvo un brote psicótico.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 El juez Peinado, primera víctima del 'caso Begoña Gómez'
- 2 Vacaciones más caras en Benidorm que en Mikonos: la cruel realidad del turismo nacional
- 3 El general español que creó el primer poblado de esclavos libres
- 4 Conclusiones de un rojo sobre Broncano y de un facha de Motos
- 5 El PSOE vela armas para su batalla del Ebro
- 6 Marlaska: de la protección saharaui a los traductores marroquíes
- 7 Quiénes son los detenidos españoles relacionados con el CNI
- 8 Arsuaga y Millás, después de tres libros juntos: "No somos amigos"
- 9 Ábalos, el chivo expiatorio, por Casimiro García-Abadillo